CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Como consecuencia de un deterioro en los niveles de financiamiento de la banca comercial hacia unidades económicas pequeñas y medianas en Tamaulipas al menos unas 18 mil empresas de la entidad cerraron operaciones en los últimos 12 meses.
Las cifras del Banco de México, el INEGI y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores reportan que el crédito de la banca comercial solo se concentra en las grandes empresas, que las pymes están quebrando y que más del 64% de la estructura económica de la entidad está en situación vulnerable.
El crédito a las pymes en el Estado se redujo del 8% del PIB en 2010, al 6% en 2014 lo que ha dejado fuera a más de 128 mil empresas.
En consecuencia, hace 5 años en la entidad había unas 95 mil empresas de las cuales, apenas 9 mil tenían acceso al crédito de la banca comercial.
Al inicio de 2015, los Censos del INEGI reportan que en la entidad hay más de 125 mil empresas, pero la información de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores reporta que apenas 7 mil 281 empresas tienen créditos vigentes.
A su vez, el Banco de México confirmó que en su mayoría, acceden al financiamiento de la banca las empresas que tienen más de 100 empleados.
El resto de las empresas se financia con sus proveedores según reporta la Encuesta Trimestral del Banco de México, la cual releva que en las las principales fuentes de financiamiento por tipo de oferente reportadas por las empresas fueron: proveedores con 83.6 por ciento de las empresas (83.2 por ciento en el trimestre previo), banca comercial con 35.8 por ciento de las empresas (36.2 por ciento en el trimestre previo), otras empresas del grupo corporativo y/o la oficina matriz con 28.9 por ciento del conjunto (27.3 por ciento en el trimestre previo), principalmente.
La ausencia de financiamiento se conjugó con un deterioro acelerado de la calidad del empleo, la pauperización de los salarios, un sobre endeudamiento de las familias que vieron reducida su capacidad de compra y restaron a su ingreso disponible lo que ocasionó que al cierre del año pasado unos 18 mil negocios cerraron operaciones en Tamaulipas en 2014.
Hasta ahora, las empresas no han invertido mucho en expandir su capacidad porque no ha habido suficiente nivel en las ventas, las cuales han estado estancadas precisamente porque el empleo tardó 4 años en siquiera recuperar sus niveles previos a la crisis de 2009 y las familias por su parte dedicaron sus ingresos a pagar las deudas que dejó el espejismo provocado por inversiones públicas que se hicieron con dinero prestado.
El principal riesgo es que ahora que la economía estatal se está recuperando su ritmo de expansión del cual depende el empleo y los ingresos de las familias, se estará topando con una limitada capacidad y estrangulamientos productivos que ahora serán mucho más graves antes de la crisis de 2009.
De acuerdo con información de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, el saldo del crédito empresarial en la entidad es de 28,314 millones de pesos frente a los 24,822 millones de 2013. Se trata de un aumento de más de 3,492 millones de pesos en solo un par de años.
En contraste, la cifra de empresas que han accedido al financiamiento de la banca comercial pasó de poco más de 9 mil en 2013 a 7,181 actualmente. Casi 2 mil empresas menos que reciben crédito de la banca. Lo anterior significa que al menos 128 mil empresas están fuera del financiamiento bancario.
Con ello, en Tamaulipas, el financiamiento de la banca al sector productivo es 4 veces menor al promedio nacional y constituye una de las principales causas del bajo nivel de crecimiento económico que registra la economía estatal en los últimos años.
Los bancos con clientes en la entidad tienen hoy una cartera de crédito vigente que representa menos del 6% del PIB estatal, es decir, uno de los niveles más bajo de financiamiento en proporción al tamaño de la economía. A nivel nacional este porcentaje es superior al 23%.