¿Dónde quedó aquél Partido Acción Nacional que siempre tomaba la iniciativa para debatir con los candidatos del Revolucionario Institucional y de la izquierda populista, como estrategia para vapulear los típicos errores gubernamentales?
Ese PAN no lo vamos a encontrar, al menos no en esta elección, en Tampico. En el Distrito Ocho ese blanquiazul con un aspirante listo para debatir en serio y no con condiciones inverosímiles nomás no existe.
Cierto, el panismo porteño ya metió un oficio para solicitar a la Junta Distrital 08 del Instituto Nacional Electoral (INE) la organización de un debate, algo que ya habían hecho cuatro partidos: Movimiento Ciudadano, Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y el PRI.
Sin embargo, la propuesta de debate planteada por el PAN tiene una condición que dejó un mal sabor de boca en tiempos en que, se supone, se vive una candente democracia y una pluralidad nunca antes vista en la historia de México y de Tamaulipas.
¿Cuál es esa lamentable condición? Resulta que Acción Nacional quiere que solamente participen 5 partidos en el debate, ni uno más. Es decir, quedarían fuera de la posibilidad de debatir 5 candidatos a la diputación federal. Esa es una franca discriminación… con la intención de fondo de que el debate sea imposible, que no se realice.
Ayer, en rueda de prensa, María Elena Figueroa Smith, candidata del PAN a diputada federal por el Distrito Ocho, reveló que el blanquiazul había solicitado al INE la organización de un debate, pero con la condición de que no participen todos los aspirantes, sino nomás cinco.
Sin tener muy en claro quién debe participar, la aspirante panista dijo que en el debate deben estar los partidos que hayan alcanzado las mayores votaciones en procesos recientes, y afirmó que tendrían que participar el PRI, el PRD y… ¡¡¡Morena!!!
Ahí, se le hizo la observación de que Morena es la primera vez que participa en una elección como partido político, por tanto ni siquiera tiene votos que reflejen, en promedio, el porcentaje de los ciudadanos que simpatizan con su propuesta.
Lo que llamó la atención es que María Elena Figueroa Smith primero dijo que el debate tenía que ser entre los 5 partidos políticos con mayor votación, pero luego comentó que quiere debatir con todos, con la condición de que no participen todos y con el énfasis que no asista al debate el Movimiento Ciudadano. ¿Quedó claro? ¿¿¿???
Así lo trató de explicar la candidata del PAN. A continuación, esa parte de las preguntas y respuestas de la rueda de prensa realizada en la sede del panismo porteño:
– ¿Para usted candidata, con cuáles partidos le gustaría debatir además del PRI?-, le preguntó el autor de esta columna a la aspirante blanquiazul.
– ‘Con los cinco que están en la más alta votación, yo siento que el ciudadano tiene derecho a escuchar un debate entre los partidos que tienen la mayor cantidad de votos. No es lo que yo quiera, es lo que considero que es el derecho de los ciudadanos’-, respondió María Elena Figueroa.
– ¿Entre esos partidos estaría el PRD, el Movimiento Ciudadano y el Partido Verde?
– ‘Yo no pondría ahí al Movimiento Ciudadano… pondría al PRD… a Morena, posiblemente…’
– Pero Morena es la primera vez que participa-, se le comentó.
– ‘Pues pondría a… la verdad no sé quiénes son… después del PRI y PRD los que tienen el mayor porcentaje de votos…
– ¿Pero usted, entonces, descartaría debatir con Lalo Cantú (candidato del Movimiento Ciudadano)?
– ‘No, yo no descarto a nadie, yo estoy dándole la bienvenida a todos, yo quiero debatir con todos, hay un documento donde estamos pidiendo el debate con todos, sin embargo, si no están los principales, es como, si no están los principales, entonces siento como si no estamos haciendo un servicio al ciudadano’-, respondió la panista.
Está muy claro el intento de estrategia del PAN y de María Elena Figueroa Smith: no quieren que participen en el debate ni Lalo Cantú, candidato del Movimiento Ciudadano, ni Daniel Morales González, del Partido Verde. Esa es la jugada blanquiazul.
Por lo visto, la candidata panista no quiere toparse con el presidente de Tamaulipas por la Paz, ni con el joven empresario que dejó el panismo para incursionar ahora con los ecologistas, partido donde sí lo toman en cuenta.
Vuelvo a plantear la pregunta inicial: ¿Dónde quedó aquél Partido Acción Nacional que le gustaba empujar los debates? ¿Dónde quedaron sus candidatos con capacidad de debatir y de hablar de POLITICA -así con mayúsculas, aunque la palabra se encuentre sumamente desprestigiada-?
En mi opinión, creo que un grupito de ‘asesores’ que giran en torno a Germán Pacheco Díaz, están ‘protegiendo’ más de la cuenta a María Elena Figueroa Smith, la que podría debatir con cualquiera de los candidatos que compiten por la diputación federal por el Octavo Distrito siempre y cuando dejen de inyectarle tanta inseguridad.
La ‘sobreprotección’ a la candidata ya resulta contraproducente. Al tiempo.
YA LO HABIA DICHO…
En una charla de café, con voz firme y segura, Eduardo Cantú Elías ya lo había dicho: ‘María Elena Figueroa tiene miedo de debatir y, en particular, tiene miedo de debatir conmigo’.
¿OSORIO CHONG, PRESIDENTE DEL PRI?
Lo escribió ayer el profesional y muy bien informado columnista de El Universal, Salvador García Soto: Miguel Angel Osorio Chong, actual secretario de Gobernación, es el posible relevo de César Camacho en la presidencia nacional del PRI. Tamaulipas, ahí te hablan. ¿Qué tal?




