Les quedan menos de tres semanas para hacer campaña a los candidatos de los diversos partidos que aspiran a las diputaciones federales que estarán en juego el 7 de junio, por lo que es previsible que en el resto del plazo acentúen sus actividades en busca del apoyo de los electores.
Como se sabe, serán electos 300 legisladores de mayoría relativa y complementariamente 200 por la vía de representación proporcional. Los aspirantes encuadrados en el primer caso son los que están haciendo talacha, mientras que los segundos sólo tienen que esperar el resultado de la votación para que se determine quiénes alcanzarán un asiento en el palacio de San Lázaro sin tener que despeinarse.
Participan en esta contienda los partidos Revolucionario Institucional, Acción Nacional, Verde Ecologista, de la Revolución Democrática, del Trabajo, MORENA, Nueva Alianza, Encuentro Social, Humanista y Movimiento Ciudadano.
Algunos de ellos sólo están haciéndolo por mero trámite, pues queda claro que no tienen ninguna posibilidad de triunfar e incluso podrían hasta perder su registro si no alcanzan el mínimo de votación, como podría ser el caso de los partidos Encuentro Social y Humanista, que por primera vez participan en una elección. Sería su debut y despedida.
La real disputa política se da entre el PRI y el PAN a nivel nacional, aunque en algunas entidades el PRD puede dar el campanazo, como sería en el Distrito Federal, Michoacán y Guerrero, que han sido sus principales enclaves en los últimos años.
El Revolucionario Institucional tiene la indiscutible ventaja de que está en la presidencia de la república y en las gubernaturas de la mayoría de los estados, lo que le abona un valor agregado pues queda claro que puede tener a su disposición un elevado número de operadores que aún cuando pertenecen a la administración pública pidieron licencia para actuar en las campañas a favor de los aspirantes del tricolor.
Acción Nacional estuvo durante doce años al frente del gobierno de la república, pero no pudo o no quiso construir estructuras propias que sustituyeran a las que a través de décadas erigió el priísmo, sino que simplemente se montaron sobre éstas en una convivencia que a la larga le resultó altamente dañina. Tanto VICENTE FOX como FELIPE CALDERÓN departieron alegremente con la CTM, la CNOP y la CNC, auténticos entes del PRI.
Pero frente a esa ecuación de partidos, está una ciudadanía cada vez más informada que ya no se traga fácilmente los anzuelos que les sueltan los protagonistas políticos y que ya en varias ocasiones ha emitido un voto de castigo contra el PRI, como en aquella jornada en la que CUAUHTÉMOC CÁRDENAS se enfrentó a CARLOS SALINAS DE GORTARI con un resultado que hasta hoy es materia de sospecha y discusión.
Por ello, con todas las ventajas de ser gobierno, el Revolucionario Institucional no debe confiarse en que se llevará el “carro completo” como afirman algunos de sus pregoneros. La actual administración de PEÑA NIETO no las tiene todas consigo tras los resbalones que ha tenido no sólo el primer mandatario sin o varios de sus colaboradores. No faltan los que dicen que es un gobierno inmóvil pero con dotes inmobiliarias, en referencia a las casas de la primera dama y del secretario de Hacienda.
Sólo que ese despertar cívico del electorado no parece estarse manifestando en el actual proceso, como por lo demás, ocurre casi siempre en elecciones intermedias. Las campañas producen somnolencia y los ataques que se lanzan las diversas agrupaciones políticas acentúan la indiferencia de los mexicanos, cuyo desinterés ha sido y es ampliamente perceptible.
La previsible poca concurrencia que habrá a las urnas el primer domingo de junio, que algunos expertos calculan en menos del 50 por ciento de la lista nominal de electores, abre la puerta a otro elemento que puede decidir los comicios: la movilización de masas la fecha de la elección. Para decirlo en términos claros, la voluntad colectiva queda a merced del “acarreo”. Pero así es el juego político.
Tal como lo anunciamos en nuestra anterior colaboración, el sábado por la noche el ex alcalde JOSÉ FRANCISCO RÁBAGO CASTILLO y un grupo de amigos y ex colaboradores le ofrecieron un acto de apoyo a la candidata del PRI a la diputación federal por Tampico, MERCEDES DEL CARMEN GUILLÉN VICENTE, quien por cierto aventaja a su desdibujada oponente panista MARÍA ELENA FIGUEROA SMITH, que parece haberse extraviado.
Junto a PEPE estuvieron, ALEJANDRO RÁBAGO, GABRIEL MALDONADO PUMAREJO, SALVADOR ALADRO, BENITO TORRES, EDUARDO INGUANZO MANRIQUE DE LARA, GERARDO OLGUÍN, CÉSAR AGUILAR SILVA, GERARDO ARGÜELLO, CLAUDIA BÁEZ, SERGIO MALDONADO PUMAREJO, JAIME DÍAZ CASTILLO, SALVADOR SARMIENTO, FLOR GUEVARA, GUILLERMO AGUIRRE, BENITO ABAD, BRENDA ZAMARRÓN, AMELIA RAVELO, ARACELY TAVERA, ANA JULIA ROY, JORGE VILLALOBOS y el colega DANIEL CONSTANTE.
El mensaje de apoyo estuvo a cargo de la diligente doctora MARGARITA ÁLVAREZ ORTIZ, quien fue eficaz colaboradora de PEPE RÁBAGO en el área de Desarrollo Social del ayuntamiento y que además trabaja con ahínco a favor de su partido. Y también estuvo el fin de semana en la zona conurbada el diputado federal priísta MARCO ANTONIO BERNAL, que en su afán de promoverse como prospecto a la candidatura tricolor al gobierno del estado, se reunió con el ex alcalde de Altamira JAVIER GIL ORTIZ y con el antiguo dirigente estudiantil JUAN MANUEL SÁNCHEZ GUERRERO a quienes habría pedido su apoyo “para que ya no haya otro gobernador de Ciudad Victoria”.
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