Los grillos tamaulipecos son de chispa retardada y poco fósforo, y por esa razón les regalo algunas ideas para que le entren al futurismo de la gubernatura con mucha clase y estilo. Las ideas son las siguientes:
1.- Por atrapar la gubernatura se ha adelantado el calendario político y se pelea hasta entregar la chequera, porque el Gobierno sigue siendo el mejor empleo de los ambiciosos que codician el poder y el dinero.
2.- El próximo Gobernador de Tamaulipas debe ser un ciudadano acorde con la euforia de privatización que vive el país. Alguien capaz de vender todo, incluso las ilusiones de sus hijos.
3.- Los aspirantes a la gubernatura son como los perros de rancho, sólo uno sabe a qué le ladra.
4.- El camino hacia la gubernatura no pasa por Almoloya.
5.- El candidato ideal para la gubernatura debe ser un «picudo» con un mensaje barato, un grillo de planta baja, un seductor verbal y un demagogo con una sonrisa que se enciende y se apague como una lámpara.
6.- Los aspirantes que fueron a las oficinas de Bucareli recibieron el beso del diablo.
7.- En la lucha por la gubernatura ningún apoyo o aplauso son gratis. Quien los recibe tendrá que pagarlos, y más temprano que tarde.
8.- La gubernatura sigue todavía en la cola de un venado, y aún no hay nada para nadie. Cualquier «grillo» puede ser.
9.- El aspirante ideal a la gubernatura debe ser tan firme y derecho como las patas traseras de un perro callejero, y haber vivido experiencias eróticas con cleopatras ejidales y sementales de granja.
10.- El destape de la gubernatura será anticlimático y «gandalla matará a carita».
11.- Aunque se esconda tanto como ratón de iglesia, Carlos Flores Rico sueña con la gubernatura de Tamaulipas, y anda haciendo grilla de oreja y de balcón con los miembros del gabinete económico del presidente.
12.- La gubernatura no se consigue por lo que digan los periódicos, pero sin la adecuada imagen que proyectan los periódicos no hay gubernatura.
13.- La Sedesol no es el último escalón para llegar a la gubernatura, pero es una hamaca espléndida para soñar con ella.
14.- El candidato ideal para la gubernatura debe ser un político distinguido, que haga honor al prestigio ganadero de Tamaulipas, porque siempre enviamos reses al Congreso.
15.- La batalla por la gubernatura sólo tiene dos combatientes reales: un victorense y un «chilango». El más amigo del Gobernador será el elegido.




