CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Durante 21 años, Blanca Valles Rodríguez ha dirigido el Sindicato Único de Trabajadores al Servicio de los Poderes del Estado. Es el liderazgo sindical más longevo, el único que sobrevive al viejo corporativismo sindical priista, y va por otro periodo… A menos que se le haga ser candidata del PRI a la alcaldía victorense.
A lo largo de estos 21 años ha negociado con cuatro gobernadores el aumento salarial de los trabajadores, ha sido dos veces diputada local y si es elegida por cuatro años más, sentará a la mesa al próximo gobernador de Tamaulipas.
“Pensé en retirarme, pero aquí estoy”, admite en entrevista, cuando se encamina a un nuevo periodo que la mantendrá 25 años en el poder.
La reelección de Blanca Valles llega en tiempos políticos.
¿Cambiaría el SUTSPET
por la alcaldía?
Antes de dar una respuesta, lo piensa.
“El cargo que tenga, nunca será un impedimento para tomar decisiones en su momento”.
¿Le interesa a usted
la alcaldía de Victoria?
“No podemos descartar a nadie, ni me descarto tampoco”.
¿Cómo andan sus
relaciones con las bases?
“Bien, creo que mis compañeros están contentos, que no satisfechos, porque cada vez hay más necesidades”.
¿Con qué gobernador ha sido más difícil la relación?
“Todos tienen un sello especial, pero con todos logramos llegar a acuerdos. Cuando nos sentamos en las mesas de negociación, el principio que utilizamos es ganar-ganar, no se trata de ir a demostrar fuerzas”.
¿Le ha tocado perder una vez frente a los gobernadores?
“A veces se tiene que ceder, pero no se deja de avanzar”.
¿Cómo le fue con Manuel
Cavazos Lerma?
“Bien, en un estira y afloje, porque me tocó negociar en enero del 95 con una devaluación, y logramos que todos los trabajadores lograran aportar al fondo de Upysset”.
¿Qué le regateó?
“Más que nada era una observación, me decían que porqué luchaba por los trabajadores que no eran del Sutspet, eran eventuales, y para mí los trabajadores son iguales”.
¿Pensó en algún
momento en el retiro?
“Sí claro. Pensé en retirarme, pero aquí estoy”.
¿En qué momento?
“Bueno, me considero capaz de realizar otras actividades, pero aquí, ha sido la petición general de mis compañeros y es la confianza que me han tenido para sacar adelante lo que está pendiente”.
¿En qué ambiente llegó
a la dirigencia?
“Los servidores públicos estábamos totalmente divididos por colores y una vez que terminaban las contiendas, continuábamos con las etiquetas de colores, con áreas muy disconformes y llegamos con un color blanco que llamó a la unidad”.
¿Batalló para que el gobernador Cavazos la aceptara?
“No, la reunión que tuvimos los cuatro aspirantes, en aquel tiempo, fue el respeto al que quedara, trabajar con él y me tocó”.
¿Supo persuadir a los gobiernos en todo este tiempo?
“Más bien es en qué forma lo pides, peticiones basadas en una realidad que se vive. Los tiempos donde el trabajador tenía que salir a una lucha ensangrentada para pedir un derecho ya no existe”.
¿Con Tomás, con Eugenio…?
“Con todos hemos avanzado, pero este Gobierno de Egidio Torre, ha implementado el sello humano, es el que más le ha apostado a dar el derecho de la seguridad laboral a los trabajadores”.
¿Qué les entregó?
“Más de cuatro mil bases —sindicalizados— que fueron entregadas estos cinco años y una reforma a la Ley de Upysset que todo mundo le sacó al costo político y al costo económico, pero además, la reforma en donde se les reconoce la jubilación y la pensión a cada trabajador, aun, y no hayan aportado al Ipysset”.
El Consejo Estatal Ordinario del próximo viernes, será el escenario en donde Blanca Valles dará su cuatro informe de labores y dará paso a un nuevo periodo en el SUTSPET. No tiene
rival enfrente y la autoridad estatal se ha mantenido distante de su intento por reelegirse.
Por eso, es casi seguro que cuando empiece el nuevo gobierno, Blanca Valle seguirá allí… A menos que los beneficios de las cuotas de género le hagan alcaldesa.