MÉXICO, D.F.- El debut oficial de Tomás Boy como técnico de La Máquina no fue sinónimo de una gran entrada en el estadio Azul.
Las gradas del recinto cementero lucían prácticamente vacías a falta de media hora para el choque ante Dorados.
La llegada de Boy al banquillo azul fue esperada por los aficionados al cuadro capitalino por ser considerado un entrenador de “sangre caliente”, contrario a lo que se dice de otros estrategas que han pasado por La Noria.
Sin embargo, parece que esto no acabó por convencer a los fans celestes.