CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- La noche del sábado, la celda 5 del relleno sanitario empezó a quemarse por causas desconocidas, por lo que acabó convertido en un dantesco incendio que consumió la mitad del área y causó el desalojo forzado de 400 pepenadores para evitar riesgos.
La situación, al cierre de esta edición, no había sido controlada por Protección Civil, y aunque tomaron medidas preventivas, no incluyeron retirar a alrededor de 50 pepenadores que continuaron realizando su tarea en el área.
En cuanto al origen del siniestro, Protección Civil las desconoce, y de manera extraña, los mismos pepenadores en el lugar no quisieron proporcionar dato o información al respecto.
De acuerdo a Francisco Orihuela Solís, el incendio inició a las 20 horas del sábado, sin conocerse las causas, pues aseguró, pudo ser cualquier cosa.
Desde temprana hora, los bomberos estuvieron aquí, hicieron el trabajo y dejaron una motobomba de guardia por si se requería.
A las 12:00 horas, el fuego se expandió nuevamente y tomó fuerza a otros lugares, por lo que cubrió una tercera parte de la celda, y alcanzó el área donde algunos pepenadores trabajaban.
Francisco Orihuela arribó al lugar y dijo:
«Lo importante es prevenir que el fuego no se extienda, y para ello, vamos a montar guardia con una motomobomba».
Agregó que pretenden atacar el problema con agua y tierra, que es la solución más viable para controlar la situación, además de que montarían guardia con apoyo de una motobomba para evitar que se agrave la situación.
Por otra parte, trascendió que un supuesto encargado del relleno, de apellido «Chapa», trató de impedir las labores de los bomberos, argumentando que era preferible que se quemara para que atendieran las instalaciones, pues falta equipo para controlar incendios. La fuente, que pidió el anonimato, aseguró que «Chapa» buscaba que el fuego se expandiera y con ello evidenciar la falta de equipo en el relleno sanitario, para controlar estos eventos.
Al cierre de esta edición, los bomberos habían enviado 3 motobombas de apoyo, y una ambulancia de Protección Civil para cualquier situación que se pudiera presentar.
Cabe mencionar, que pese al riesgo de explosiones de recipientes y llantas, no se evacuaron a los pepenadores del sitio.




