Como se había anunciado, el Comité Ejecutivo Nacional del PRI emitió ayer la convocatoria que regirá los tiempos de la elección y designación del candidato a gobernador de Tamaulipas, cuya identidad, sin embargo, como esta no trae dedicatoria, se desconoce aún, a sólo 10 días de su registro ante la Comisión Nacional de Procesos Internos del partido político.
De acuerdo con el documento, el 23 de enero sesionará la Comisión Estatal de Procesos Internos para emitir el manual de organización y el 30 el registro de aspirantes, que en 24 horas declarará procedente o no, la inscripción del o de los solicitantes. También establece que la precampaña será del 1 al 28 de febrero y este último día tendrá lugar la convención de delegados para proceder a la ratificación del candidato o si hay más de uno, a su elección.
En medio de la incertidumbre, lo único claro a estas alturas del cardíaco proceso selectivo es que a partir de la publicación de la convocatoria en cualquier momento el alto mando nacional revelará el nombre del triunfador de la competencia o ¿será hasta que regrese el presidente Peña Nieto del extranjero?
En las filas panistas se rumora que el ganador fue el senador Francisco Javier García Cabeza de Vaca, pero que su designación no se hará oficial hasta en tanto no se conozca la del partido que gobierna la entidad.
Cambiando de tema, aunque será finalmente un acuerdo del gobernador Egidio Torre Cantú y el dirigente nacional del STPRM, Carlos Romero Deschamps, el que definirá cuál será el candidato del PRI a alcalde de Madero, el secretario general de la Sección 1 del gremio, Humberto Oliva Barreda, ya tiene el visto bueno del alto mando del gremio de Pemex para disputar la postulación.
Tenemos entendido que durante la reunión que los jerarcas locales del sindicato de Pemex sostuvieron a principios de enero con el nativo del Barrio del Golfo en la capital del país para dar la bienvenida el al 2016, el dirigente seccional fue propuesto y aceptado para buscar la candidatura al gobierno de la ciudad, por la que también están moviendo sus influencias Guadalupe González Galván y el diputado Erasmo González Robledo.
Si se concreta la designación de Oliva Barreda, que los enterados dan como un hecho, la candidatura tricolor a la diputación por el distrito electoral 20 tendrá que otorgarse a un elemento del grupo de Lupe, alguien como la Jefa de la Oficina Fiscal, Honoria Mar Vargas, el ex regidor Cristóbal Ríos Longoria o hasta el propio ex alcalde, aunque a este lo que le interesa es la presidencia municipal.
Asignar las dos candidaturas, la de la alcaldía y la de la curul, al sindicato, como algunos suponen, debilitaría la unidad del priísmo y expondría al partido político al riesgo de pugnas, inconformidades y hasta de rupturas inoportunas.
Para fortuna y beneplácito de los guías y operadores del tricolor, fracasó la alianza del PAN con el PRD, situación que favorece a los priistas ya que, además de que impedirá que las votaciones se polaricen entre el PRI y Acción Nacional, dividirá el sufragio y favorecerá la victoria priista, a la que contribuirán igualmente las candidaturas independientes de los ex diputados Ricardo Manzur Oudié y Jesús Olvera Méndez.
Bajo esas condiciones, se fortalece la posibilidad de que el presidente del Consejo Empresarial, Andrés Zorrilla Moreno, obtenga la nominación como candidato externo del PAN a la alcaldía petrolera y que el Partido de la Revolución Democrática le pida otra vez a Joaquín Hernández Correa que acepte la candidatura o que, si este no está interesado en volver a ser comparsa del PRI, como lo hizo hace tres años, entonces que se la asignen al ex alcalde Jorge Mario Sosa Pohl, que está urgido de salir del anonimato y está tratando de adquirirla.
Los días 4 y 5 de marzo, el Consejo Electivo perredista decidirá quiénes serán finalmente los nominados.
Son las pocas opciones con las que cuenta el cada vez más disminuido Partido del Sol Azteca para mantener la cuota de representantes en el Congreso estatal y los ayuntamientos así como las prerrogativas económicas que le otorga la ley, pero sobre todo impedir que lo desplace MORENA, el Partido de AMLO.




