MONTERREY, NL.- Donald Trump es exactamente como millones de estadounidenses en el sentido de que le encanta la música de Adele.
El ex conductor de la televisión de realidad y actual candidato presidencial republicano ha estado tocando canciones de Adele a todo volumen en mítines recientes, como «Rolling in the Deep» en un encuentro en Oklahoma y «Skyfall» en otro en Ohio, informó EW.
Pero la cantante de «Hello» no le corresponde el afecto.
Un representante de la estrella comenta a EW, «Adele no ha dado permiso para que su música se use en ninguna campaña política».
Adele se une a una lista siempre creciente de músicos que reprenden a Trump por usar sus canciones.
Steven Tyler de Aerosmith, Neil Young, y Michael Stipe de R.E.M. han exigido que el candidato no utilice su música como parte de su campaña. La declaración de Stipe fue particularmente despiadada, al calificar a Trump y sus partidarios como «hombrecitos tristes, acaparadores de atención y hambrientos de poder».
Sin embargo, Dee Snider de la agrupación Twisted Sister sí le dio permiso a Trump de usar la canción de la banda de 1984, «We’re Not Gonna Take It».