MONTERREY, Nuevo León.- Más de 100 elementos de la Policía Federal, con equipo antimotines, ingresaron al Penal del Topo Chico, donde presuntamente se realizará un cateo en las áreas de reclusión.
Los policías federales ingresaron con botes de gas y extintores por uno de los accesos traseros del centro penitenciario, mientras que por el otro entraron cientos de elementos de Fuerza Civil.
A los policías estatales se les pidió ingresar sin ningún tipo de arma, equipados únicamente con cascos, chalecos y equipo de protección.
Hasta las 17:50 horas, los uniformados de ambas corporaciones se mantenían agrupados en los patios del penal, aparentemente esperando la orden de iniciar su intervención en el centro penitenciario, donde esta madrugada ocurrió un motín que dejó un saldo de al menos 49 muertos, según el reporte oficial.
Alrededor de las 18:15 horas se suspendió la visita a familiares de internos, lo cual causó molestia entre los familiares, ya que tenían dos horas haciendo fila para entrar.
Las quejas no se hicieron esperar y aseguraron que los policías federales estaban golpeando a los reos.
La puerta de acceso a los familiares al Penal del Topo Chico, ubicada por la calle Cuautla, se encuentra cerrada y no se permite el acceso a nadie, solamente a los custodios y a uniformados de Fuerza Civil para seguir retirando a la gente que se encuentra en el interior.