CIUDAD DE MÉXICO.- A punto de que el Papa Francisco llegue a México, el Hangar Presidencial luce prácticamente lleno.
Los 5 mil lugares en gradas, que se instalaron en forma de “L”, se distribuyeron en cuatro colores ?morado, negro, gris y blanco? para mantener mayor orden.
Del total de invitados, 2 mil 500 son de la Iglesia católica y ocupan la sección morada; el resto son funcionarios y amigos y familiares suyos.
A fin de mantener un mejor control, a la sede llegaron grupos de cinco camiones del transporte público de la Ciudad de México del Palacio de los Deportes al Aeropuerto.
Se colocaron 13 filtros de seguridad para revisar que los invitados ingresaran sin armas, latas o botellas de cristal.
La espera se amenizó con canciones del álbum México se llena de luz, y el maestro de ceremonias que tradicionalmente dirige los actos protocolarios del Presidente da instrucciones sobre lo que se deberá hacer una vez que aterrice el avión papal.
Se tiene listo un mariachi que le cantará “Las Mañanitas” al Papa cuando baje del avión.
La sección de las gradas más efusiva es la morada, asignada a las organizaciones pastorales, que en todo momento han cantado canciones religiosas.
Después de las 18:00 horas comenzaron a llegar los familiares del Presidente Enrique Peña Nieto y su esposa Angélica Rivera.