CIUDAD DE MÉXICO, México.- A un año de operaciones, la aplicación para teléfonos inteligentes No Más Extorsiones, del Consejo Ciudadano de la Ciudad de México, ha recibido 119 mil 545 reportes de llamadas realizadas desde números ubicados para extorsión, lo que equivale a 326 al día y 13 cada hora.
La aplicación, disponible solo para teléfonos inteligentes con sistema Android -y próximamente Windows-, ha permitido que los usuarios sumen además 12 mil 600 nuevos números a la base de datos de teléfonos utilizados para la extorsión, la cual suma ya 112 mil números.
Los reportes recibidos provienen de todo el país, ya que la aplicación ha sido descargada en todos los estados, lo cual refleja el hecho de que la extorsión es el segundo delito que más se comete a nivel nacional, de acuerdo con el instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI)
El organismo creó la aplicación en el mes de febrero de 2015 como un mecanismo ciudadano de protección, ya que son los reportes de los propios usuarios los que alimentan la base de datos, después de pasar por diversos filtros. Así, cuando una persona recibe una llamada de un número denunciado la aplicación emite una alerta para que no conteste.
El Consejo Ciudadano tiene como primer paso para evitar la extorsión telefónica el colgar y no engancharse, en este caso, ya ni siquiera es necesario tener que contestar.
El 51 por ciento de los usuarios son adultos de 21 a 40 años de edad, un 30 por ciento son mujeres y el resto varones, de acuerdo a los datos de registro.
Es importante destacar que a lo largo de la actividad de la aplicación diversas instancias educativas, de seguridad, empresariales y hasta gubernamentales han tenido registros, en todos los casos se platica con las instancias, se establecen medidas y se dan de baja los números, ya que se trata de instancias de servicio a la ciudadanía.
Sin embargo, los números quedan en una lista gris, donde se mantienen por si vuelve a ocurrir un hecho de este tipo, si este es el caso regresa a la base general y se habla con las autoridades pertinentes.
Finalmente, la aplicación surgió como un mecanismo de protección ciudadana ante este delito, derivado de lo fácil que es su realización y lo difícil que es su persecución.