TULA, Tamaulipas.- Gran malestar existe en este Pueblo Mágico, luego de que el alcalde Juan Andrés Díaz Cruz, privatizó el principal atractivo como lo es el paseo del Arroyo Loco, el cual tiene más de 15 días cerrado a los pocos visitantes que acuden, por lo que los habitantes piden la intervención del gobernador del estado.
“Juan Andrés Díaz le miente al gobernador, al decirle que al año se reciben 160 mil visitantes, cuando al pueblo mágico apenas llegan cerca de 5 mil personas al año, ya que no hay capacidad para atender a tanta gente y aparte el único atractivo turístico lo tiene cerrado”, afirmaron comerciantes de la zona.
Baudelio López, afirmó que es el sector comercio el más afectado por el cierre del paseo del Arroyo Loco, debido a que la poca gente que viene a visitar Tula, no puede gozar de los atractivos, debido a que unos están en remodelación y otros se encuentran cerrados.
“Ahorita no hay nada qué ofrecer a los visitantes, porque la Iglesia de San Antonio está cerrada porque la están remodelando y el único paseo que se encuentra casi terminado está cerrado desde hace varias semanas”.
Dijo que es falso que el informe que el alcalde de Tula, Juan Andrés Díaz, le dio al gobernador en su última visita, donde le dijo que en el 2015 se había registrado la visita de 160 mil turistas.
“Esto es totalmente falso, porque cuando mucho vinieron algunos 5 mil en el año, debido a que Tula aún no tiene capacidad para atender a tanta gente, ni hoteles suficientes”.
Agregó que lo que más duele es que la obra donde el gobierno federal y del estado invierten más de 48 millones de pesos, el Alcalde pretende privatizarla y hasta cobrar la entrada.
“Hace dos semanas ordenó que todos los accesos fueran cerrados y se mantienen con candados para evitar que la gente entre y sólo pueden observarse desde lejos”.
Indica que los números no coinciden, ya que se Tula registrará 160 mil visitantes, cada día se tuviera el registro de por lo menos 430 personas, las cuales no se ven por ningún lado, ya que en estos momentos la ciudad está desolada.
Baudelio López, reconoce que se están realizando diversas obras y que pronto Tula se convertirá en un atractivo turístico, pero no se le debe mentir al gobernador con cifras inventadas, ya que lo que se requiere es de mayor promoción turística para este pueblo mágico.