CIUDAD MADERO, Tamaulipas.- A 78 años de la expropiación petrolera, Petróleos Mexicanos enfrenta este 2016 el mayor reto de su historia: la renovación o la muerte. Deberá realizar desde la reestructura de su nómina, de sus gastos, hasta llevar sus operaciones con mayor eficiencia, una práctica a la que no estaban acostumbrados.
Pemex es una de las fuentes de recursos mayores del país. Durante los últimos 5 años, sus transferencias al Gobierno Federal han promediado 49% sobre ventas. Estas contribuciones a través de regalías, aprovechamiento, impuestos y derechos representan un promedio de entre 30% y 40% de los ingresos del Gobierno Federal.
A finales de 2015, la compañía logró un acuerdo para cambiar su plan de pensiones al de contribuciones definidas, desde un plan de beneficios definidos e incrementó la edad de retiro de los empleados sindicalizados, que han estado en la compañía por menos de 15 años y a todos los empleados no sindicalizados a 60 años de edad y 30 años de servicio, desde 55 años de edad y 25 años de servicio que se tenía anteriormente.
Actualmente hay en la plantilla de Pemex 138 mil 391 trabajadores, de los cuales 110 mil son sindicalizados y el resto es personal de confianza, la figura del transitorio desapareció, con los recortes de 14 mil 964 trabajadores hechos en 2015, una baja de 9.7% en la plantilla laboral.
Mientras que en la Refinería Madero hay un promedio de 4,500 trabajadores actualmente.
“Los mexicanos sí tenemos que celebrar, pero los petroleros no desde el punto de vista del confort. Es darle la bienvenida a la competitividad, ya que el modelo que sirvió durante 78 años está agotado y no sirve pensar hacia un autoconsumo, porque no tiene sentido”, dijo Sergio Blanco, consultor en temas energéticos.
Destacó que si fuera tan efectivo ese modelo de 78 años, no se viviría en el atraso como en las 6 ciudades donde hay refinerías que son Salamanca, Tula, Minatitlán, Cadereyta, Salina Cruz y Ciudad Madero.
“Paradógicamente si tienes refinerías y hay dinero es para estuvieran muy desarrolladas y no lo están, son ciudades que están muy atrasadas y es porque no hay innovación, ya que los habitantes donde hay refinerías no tienen incentivos para seguirse preparando y están atenidos a que el abuelito le dejó la planta al papá y a su vez al hijo”.
Si se compara a estas ciudades con Monterrey, Querétaro, la Ciudad de México o Aguascalientes, no les importa que el petróleo este barato porque su economía no está petrolizada, dijo Blanco. “Merecemos tener más opciones, el petróleo es de los petroleros, no de los mexicanos hasta el día de hoy, no hay alguien que diga que Pemex le da 100 pesos de los ingresos,
si contribuye al gobierno pero a los ciudadanos no nos dan ni un peso”.
Blanco destacó que los petroleros tienen la oportunidad histórica para dar la bienvenida a la productividad, consideró que es el momento de demostrar el músculo.
“Si en 78 años en general se tiene la idea de que el petrolero no es el más eficiente, llegó la hora de probar que efectivamente hay gente muy valiosa. Esperaría que para los siguientes años los mismos petroleros que se queden en la industria, puedan ganar más dinero. Esperaría lo mejor pero me prepararía para lo peor”.
Reconfiguración, a medias
Sobre las condiciones de refinerías de Pemex, Blanco indicó que de las 6 plantas, 3 ya están reconfiguradas: Cadereyta Minatitlán y Madero. Queda pendiente la modernización para Tula, Salamanca y Salina Cruz.
“Si una refinería está reconfigurada quiere decir que se actualizó y se modernizaron, una refinería que no está reconfigurada, no es tan rentable”.
La capacidad de producción ha bajado en los últimos años en los centro de refinación, ya que ha resultado más rentable importar que producir en México.
“No tiene sentido económico que la tengas al 100%, la planeación de la producción va en función de la demanda, hay ciertas plantas que es más caro producir que lo que dan en dinero, no tiene sentido aumentar la producción por los precios del petróleo, es más barato importar”.
Comentó que las refinerías de México se diseñaron hace 70 años para un tipo de petróleo que químicamente tiene una especificación pero que ha cambiado, “por lo que los equipos se tienen que adecuar para que funcionen con este mismo tipo de crudo si no, va a haber taponamientos”.
“Si tienes un carro de gasolinas y le quiere echar diesel pues los fierros se van a tapar, simplemente el petróleo que sale es fuera de especificación y el que más se parece al de las refinerías es el de la costa de Texas, por eso la importación, no porque no se quiere usar el nuestro. Y vendemos mucho del petróleo a Texas porque las refinerías de allá lo pueden procesar. Es más barato traer gasolina de otro lado”.
El consultor destacó que para el ciudadano de a pie es positivo que haya competencia en el mercado, mientras que los petroleros ahora tienen que demostrar de qué están hechos, y no pensar solo en México sino en el mundo.
Entre fugas y accidentes
Al menos 14 fugas y derrames de hidrocarburo se registraron en 2015 en instalaciones de Petróleos Mexicanos en la zona sur, además de 4 incidentes de gravedad en la Refinería Madero.
Fueron reportados 7 derrames y fugas ocurridas durante ese periodo en la frontera en Reynosa, Matamoros y Río Bravo.
En lo que va del año se han registrado 3 derrames de hidrocarburos por tomas clandestinas en ductos de Pemex en Reynosa, Matamoros y Río Bravo, de acuerdo con información del propia Pemex.
La vulnerablidad de las instalaciones petroleras quedaron de manifiesto cuando en 2014, la refinería fue tema nacional por fallas en su sistema de seguridad y por el alto índice de accidentes que cobraron la vida de trabajadores.
El primer incidente ocurrió el 15 de enero cuando se dio una fuga ácido en la planta de Alquilación, donde algunos empleados resultaron intoxicados.
El escape se generó a las 10:40 horas del jueves en la planta de alquilación y en donde al parecer tres empleados que se encontraban efectuando trabajos en el área resultaron con intoxicación severa, siendo trasladados al Hospital Regional de PEMEX para ser atendidos.
Para el 27 de marzo se dio un flamazo por una sobre presión en la línea de desfogue del Complejo Procesador de Gas Arenque, ubicado en el callejón de Barriles de Ciudad Madero.
También en el día 3 de julio se presentó una fuga de hidrocarburo en el tanque MJN-T548, por la que se activó en la refinería el protocolo de emergencia al interior del patio norte de la Refinería Francisco I. Madero.
Hubo una evacuación de trabajadores, el incidente sucedió en la misma área donde fue el incendio del 2014 de un tanque de combustible y que tardó 72 horas en ser controlado. El último fue el 8 de julio, cuando una fuga de gasolina en poliductos Madero -Cadereyta ocasiona desalojo de familias. Fue fuera de la Refinería, pero técnicos especializados del Sector Ductos Madero de Petróleos Mexicanos controlaron un derrame de gasolina provocado por una toma clandestina en el poliducto Madero – Cadereyta, a la altura de la colonia Ampliación Revolución Verde, de este municipio.
Se activó el plan interno de respuesta a emergencias y se procedió a suspender el bombeo de combustible.
En el 2014 hubo accidentes más graves como el del 10 de agosto cuando hubo muertos, por una explosión de la planta de coquer cuando estaba siendo reparada, hubo 11 heridos, y antes en abril había explotado una caldera, y en mayo también se presentó un calentamiento de una bomba, ese mismo mes se presentó hubo un incendio en el tanque de almacenamiento de gasolina que tardo 30 horas en ser controlado.