* El autor es Premio Nacional de Periodismo 2016.
Está claro que el proceso hacia la sucesión estatal se realiza bajo condiciones especiales donde no cabe la politización de los temas fundamentales. En esta ocasión más que ganar votos debe imponerse la decisión de atacar a fondo la problemática que desde hace tiempo, afecta a la paisanada.
Todos sabemos cuáles son los factores, varios de ellos externos, que en veces inmovilizan a la entidad.
En este sentido hay que insistir sobre la necesidad de que los candidatos no se atengan a su carisma ni a su partido porque Tamaulipas espera mucho más de ellos, especialmente de quienes adoptaron la política como la forma de ejercer una vocación de alcances no imaginados en beneficio mayoritario.
Ya se ha dicho que la tarea será inmensa e intensa los próximos seis años, sin espacio para la confrontación y donde las propuestas han de ser definitivas para alcanzar objetivos viables en el menor tiempo posible.
Esto lo entiende muy bien Baltazar Hinojosa Ochoa pero también debieran entenderlo el resto de los contendientes porque no siempre podrán explotar la provocación ni apostar por el pleito callejero. Tamaulipas no lo merece. Ahí te hablan Cabeza de Vaca.
¿MÉXICO EN ESTADO DE SITIO?
La cámara de diputados está en camino de aprobar una modificación a la ley reglamentaria del artículo 29 constitucional mediante la cual se autoriza al titular del ejecutivo federal a suspender las garantías individuales cuando la situación de la república así lo requiera.
El primer paso ya se dio en comisiones solo falta se formalice para efectos inmediatos. En este sentido suponemos que el pleno tendrá la palabra y no podrá ser otra que la de ratificar por parte de la mayoría tricolor y sus aliados, la propuesta proveniente del senado.
Ha de saber que tocó a la tamaulipeca Merceditas del Carmen Guillén, presidenta de la comisión de Gobernación, argumentar a favor de la iniciativa privilegiando hechos provocados por el terrorismo internacional. ¿Realmente estamos en riesgos de ataques de este tipo?.
A lo mejor, podría ser, quizá, tal vez, igual y si, es probable. Uno nunca sabe con eso de que México está en la lista negra de los fundamentalistas por diversas razones. Una de ellas es que las autoridades han proclamado su apoyo a las medidas extremas adoptadas por el imperialismo contra ciertos núcleos de oriente que han arrojado un número infinito de víctimas inocentes.
Y sin ninguna necesidad incluso en contra de la doctrina juarista. Un reportaje reciente dejo helado al columnista al enterarse de que en la segunda ciudad más importante de Siria no queda ni uno del millón y medio de habitantes, sólo ruina y destrucción. ¿Y los niños?.
El asunto es que autorizando al presidente en turno a declarar en estado de excepción al país, México ingresa al grupo de naciones cuyos gobiernos presienten riesgos extremos de inseguridad e inestabilidad. (“Si de por sí”, como dijo aquel).
Por su parte el escribidor considera que no es para tanto, es decir, no se trata de protegernos de situaciones que por estos andurriales se consideran inéditas.
Estamos muy lejos de conflictos externos de violencia extrema como para que el supremo gobierno se preocupe. Más bien se trata, digo yo, de anticipar sacudidas sociales y políticas hacia el interior del país.
Es probable que el poder prevea conflictos de graves consecuencias para el sistema. No olvidéis que como resultado de la crisis institucional apenas despierta “el México bronco” que tanto preocupaba a don Jesús Reyes Heroles, cuando la inquietud transcurre por la geografía nacional cada vez con mayor fuerza y determinación de cambiar el estado de cosas. ¿Existe el temor de una revuelta a gran escala?.
Todo parece indicar que por ahí va el autorizar al presidente en turno de suspender las garantías individuales utilizando la fuerza del poder para someter lo que haya que someter. ¿Se prepara el supremo gobierno para reclamos populares que ya no serían solo de palabra, sino de confrontación violenta?.
No hay otra explicación que convalide la prisa por limitar la movilidad social y sobre todo las consecuencias que no sabemos hasta dónde podrían llegar. Ojalá la diputación federal tome conciencia enviando la iniciativa en cuestión al cesto de la basura y no avale esta bofetada que pretende eliminar la tradición heredada por la dignidad del pasado histórico… ojalá.
Recordemos que por muchos años organizaciones y partidos como el Comunista, permanecieron en la clandestinidad mientras sus integrantes o eran perseguidos o pasaban largas temporadas en las cárceles. Que no se repita esta vergüenza. México no merece revivir una situación igual cuando suponemos todo esto superado, sin embargo ¡ea!, que bajo el pretexto de probables ataques terroristas vamos por tal rumbo. Y ello es grave de toda gravedad.
¿Y qué tal si el capital internacional acelera la inquietud social tal cual ha sucedido en otras lugares de enorme riqueza en recursos naturales especialmente petroleros?. En la situación que vive México todo es posible pero lo más serio es que llegado el caso, la suspensión de garantías individuales afectaría a las mayorías que en cualquier contingencia seguirán siendo las más vulnerables.
SUCEDE QUE
Dícese del doctor Norberto Treviño García-Manzo que es un lujo para Tamaulipas. Y es que en salud pública que ha sido su responsabilidad durante el sexenio, ha dejado profunda huella y todo un reto para el futuro. ¿No sería posible que repitiera en el cargo?, digo porque esta clase de funcionarios lo desearían en cualquier parte del país. Y no es exageración porque las evidencias están a la vista del portador. Ni modo que sea invento.
Hasta la próxima.




