Un día bastante triste y lamentable fue el que se vivió el pasado miércoles en el seno de Correcaminos, ni quien lo dude.
El equipo de la Segunda División, donde sigo creyendo que hay mucho talento, jóvenes con un potencial increíble como jugadores y como entrenador alguien que lleva tatuada la verdadera ideología del ser, vivir, amar y existir bajo la filosofía de Correcaminos: Jorge Alberto Urbina Sánchez.
Era la final en la Liga de Nuevos Talentos por el ascenso a la Liga Premier, a donde los naranjas llegaban por ser campeones del Apertura 2015, ante Real Zamora, cuadro al que vencieron justamente en la final de ese torneo y que ahora, sí pudo coronarse en el Clausura 2016.
El resultado deja prácticamente noqueado a un equipo conformado por una de las camadas de jugadores más interesante que se ha tenido, sin temor a equivocarme en los últimos diez años.
Aunque eso sí, sin pecar de optimista si algo tienen estos futbolistas es fortaleza mental, aunque la loza luzca bastante pesada, saldrán a brindarse hasta el último esfuerzo, hasta la última gota de sudor, todo para defender, como se debe, la camiseta naranja.
Por si el resultado escandaloso en una final fuera poco, a Correcaminos le asestó otro golpe su propia directiva.
Y para poner en contexto: Correcaminos es un todo, único e indivisible, su historia de éxitos o fracasos, metas incumplidas, tropiezos y logros, no se pueden etiquetar en gestiones, ni eras, mucho menos si estas son administrativas.
En ese tenor, habremos de recordar cuántas veces se ha utilizado la palabra continuidad en proyectos que en un dos por tres terminan cortando procesos, con auténticas personalidades del fútbol, con gente que en base a resultados e ideas muy firmes se les cesó de la noche a la mañana en una lista interminable de técnicos que por aquí han desfilado.
Hoy, cuando los argumentos en defensa de José Sigifredo Treviño Ruiz son prácticamente nulos, cuando creíamos que ya no podía haber forma de decepcionar más a la afición, esa que a cuentagotas sobrevive en las desnutridas gradas del Marte R. Gómez y que reclamaban eficiencia, algo que valiera la pena los 45 pesos que pagan, no hubo acción.
La directiva del cuadro naranja ratificó al timonel que en dos torneos muy poco ha podido hacer por devolverle la mística a un equipo que otrora si algo tenía era vergüenza, dinamismo y ofensiva.
Es irónico que se justifique, como muchos lo hacen, que el “limitado plantel” no le permitió a Pepe potenciar a este equipo, ¡válgame!, si la chamba de un técnico es justamente esa, sacar lo mejor de cada uno de sus jugadores.
Que si faltó presupuesto, que si era lo que había, ¡puros pretextos!.
Yo les recuerdo a todos aquellos que con eso quieren escudar el mediocre paso de Treviño al frente de Correcaminos, que no esperen mucho para los próximos seis meses.
Y es que no es para nada novedad que Correcaminos no tendrá recurso para armar un plantel digno de aspirar al título en el Apertura 2016 y por lógica en diciembre, aunque haya lana, es difícil sacar jugadores de valía para reforzar.
Acuérdese que este equipo lamentablemente es gobiernodependiente, y en ese tenor su presupuesto se acabó hace justamente un año, sobrevive de milagro y ahora espera a que pasen las elecciones para ver si el gobernador que venga le quiere meter lana para poder competir decorosamente por los victorenses y los tamaulipecos.
En ese sentido no nos olvidemos que ya los principales contendientes a gobernar Tamaulipas ya dieron color y sus quereres se vinculan al Tampico-Madero que el domingo muy seguramente se coronará campeón de la Liga Premier de la Segunda División y buscará el ascenso precisamente al AscensoMX enfrentando a los Potros del Estado de México.
A eso súmele que, volviendo a nuestra triste realidad, el todólogo de Correcaminos, Manolo Campo Filizola, ya advirtió que se quedará el 70 por ciento del plantel, sí, ese mismo plantel limitado del que Treviño y sus voceros tanto hablaron los últimos meses.
Que si acaso hay con qué, se traerán tres o cuatro jugadores, ahí de medio pelo para llenar los huecos y claro, como es costumbre le jugará el dedo en la boca a los chavales de las fuerzas inferiores haciendo como que les da chance para seguir subsistiendo en la institución naranja.
Saque usted sus conclusiones y espero sus comentarios… unos me llaman amargado, otros realista, pero siempre creo que tiene usted la mejor opinión.
¡Feliz fin de semana!
@luisdariovera




