En nuestra colaboración anterior nos cuestionamos acerca de que si el segundo debate entre los ocho aspirantes a la gubernatura de Tamaulipas sería otro show similar al de la primera vez. Pues resultó así porque la mayoría de los participantes volvieron a privilegiar las denostaciones por sobre las propuestas, con el agravante de que se lanzaron señalamientos que rayan en la ofensa personal.
En efecto, el abanderado del PRD, JORGE VALDEZ y el candidato independiente, FRANCISCO CHAVIRA, se enfrascaron en un duelo verbal poco edificante, además de que nuevamente parecieron instrumento de ataque contra el aspirante de Acción Nacional, JAVIER CABEZA DE VACA, como si ese fuera el único empeño que les importa en el actual proceso electoral. Toda una pachanga en lugar de política, pues.
Pero independientemente de las banalidades, cabe destacar que casi todos ellos, incluyendo al priísta BALTAZAR HINOJOSA OCHOA, coincidieron en señalar la necesidad de acabar con la corrupción y la inseguridad.
Cuando ellos hablan de la corrupción en el sector oficial, tácitamente están reconociendo que existe, sólo que no citan casos concretos ni explican porqué hasta ahora que andan en campaña se dan cuenta de que hay malandrines disfrazados de funcionarios.
Si tomamos estos señalamientos en un estricto sentido, sería tanto como admitir que en el actual gobierno del estado y en las anteriores administraciones se dieron y se dan conductas deshonestas que no sufrieron el menor reproche legal.
Recordamos que cuando andaba en campaña, MANUEL CAVAZOS LERMA se rasgaba la camisa proclamando que se arrepentirían aquellos “que cambiaran pesos por libertad”. Que se sepa nunca hizo algo al respecto y se dice que no pocos de sus colaboradores, cuando no él mismo, se enriquecieron de manera brutal.
EUGENIO HERNÁNDEZ FLORES ha sido señalado como el hipotecario del estado, por cuando dejó una deuda que se acerca a los quince mil millones de pesos que no se sabe en qué hayan sido invertidos.
Rectores de la Universidad Autónoma de Tamaulipas han salido del cargo podridos en dinero, con ranchos, casas en el extranjero y hasta dueños de casas de empeño a nivel nacional sin que nunca se haya hecho una investigación sobre su enriquecimiento.
De estos casos concretos ninguno de los aspirantes se han referido en forma directa, tal vez porque carecen de pruebas pues los malandrines gubernamentales son abusivos pero no tontos como para dejar huellas.
Por ello el argumento del combate a la corrupción ha perdido substancia pues sólo son, en los hechos, palabras lanzadas para deleitar los oídos de los electores. Ojalá que quien resulte electo gobernador demuestre que sí está en su ánimo cuidar los intereses de la colectividad.
Lo mismo sucede con el tema de la inseguridad. Ninguno ha presentado estadísticas reales sobre los crímenes, asaltos y secuestros que desde hace años ocurren en Tamaulipas, que está entre las entidades más peligrosas del país, empezando por su capital, Ciudad Victoria, sede de los poderes estatales y donde salir de noche equivale a poner en riesgo la vida.
Pero frente a esta cruda realidad, algunos que pretenden gobernarnos prefieren perder el tiempo en acusaciones huecas antes que hacer un diagnóstico serio de lo que padecemos y proponer medidas concretos para resolver esas penurias sociales. Insistimos en que los partidos de relleno solo son una carga económica para los contribuyentes, por lo quer debería elevarse el porcentaje de votos para que conserven su registro.
Sea como fuere, los únicos rescatables del dizque debate del miércoles pasado son el priísta HINOJOSA OCHOA y el panista CABEZA DE VACA, de entre quienes seguramente saldrá el próximo titular del poder ejecutivo local y que por primera vez escenifican un duelo político verdaderamente competido entre el llamado partido oficial y uno de la oposición.
Falta un mes para saber a quién encomiendan los tamaulipecos el manejo de su destino como entidad. Seguiremos pendientes. Por lo pronto, ayer por la tarde el centro de Tampico se vistió de azul, con la presencia de su candidato a gobernador, JAVIER CABEZA DE VACA y los aspirantes blanquiazules a las alcaldías y diputaciones de la zona conurbada.
La invitada de honor fue la exprimera dama de México, MARGARITA ZAVALA DE CALDERÓN, quien por cierto está entre los prospectos a disputar la presidencia de la república en el
2018 y es llamada la “Hilary Clinton mexicana”.
Desde la mañana un auto de sonido se colocó junto al antiguo cuartel de bomberos en la calle Díaz Mirón para difundir una guapachosa composición musical que invita a votar por GERMÁN PACHECO y que tiene todo el estilo de los hermanos BERRIOS, los mismos que compusieron los temas musicales de campaña de FERNANDO AZCÁRRAGA y la maestra MAGDALENA PERAZA GUERRA cuando fue candidata panista.
Lo anterior es signo de que tal vez el PAN porteño esté dejando la modorra que parecía envolverlo y esté pisando el acelerador para darle una pelea real al Revolucionario Institucional que, hasta ahora, con la maestra PERAZA GUERRA al frente, parece invencible.
Por su parte, el candidato del PRI a la gubernatura, BALTAZAR HINOJOSA OCHOA, concentró sus actividades en el centro del estado, principalmente Ciudad Victoria. Se dice que este fin de semana podría estar nuevamente en el sur de Tamaulipas, donde se concentra uno de los mayores porcentajes de voto, junto con los municipios fronterizos.
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