Mal se vio Francisco Chavira al dejar plantados a sus seguidores que creían en él para renunciar a su candidatura independiente y sumarse a la candidatura del panista Francisco García Cabeza de Vaca, alianza que deja ver su poca convicción política y lo poco que le importaron sus seguidores que desde un principio se la jugaron con él, pero en fin diremos como decían los viejos de antes, en el pecado llevará la penitencia. En fin Dios que lo ayude, ahora sólo falta saber quiénes lo van a seguir, pues después de ser cabeza de tigre ahora es cola de gato y no precisamente de angora…. El hombre, sentenciaban la gente de ayer, vale por sus convicciones no por sus traiciones.
En tanto esto ocurre allá por la frontera chica de Tamaulipas, en el resto del estado, la lucha por la gubernatura continúa y ahora vamos a ver qué sucede pero a escasas dos semanas de que concluya el proceso electoral que vivimos, este se pone más interesante y ganará quien le ponga mejor sabor al caldo pero sobre todo quien tenga las mayorías de su parte, por lo tanto vamos a ver qué sucede de aquí al domingo cinco de junio.
Esto me recuerda al viejo líder de Llera don Guadalupe Arcos Acuña, cuando la lucha por la alcaldía de mi pueblo se daba sólo entre dos grupos políticos hacia el interior del Partido
Revolucionario Institucional y El Viejo siempre decía, bien ganados o bien perdidos pero hacia el interior del PRI, y agregaba, Si hoy no fue mañana será pero el viejo sabía lo que hacía y aunque perdiera siempre tuvo gente suya formando parte de los ayuntamientos y salía ganando, pues para él importaba más el partido al que pertenecía, por eso siempre fue respetado por todos los gobiernos e incluso por sus enemigos políticos que consideraban al Viejo toda una Institución Política.
Lo que me recuerda cuando el directivo estatal le concedió una medalla al mérito por sus cincuenta años de ser priista y al no asistir a recibirla de parte del entonces Presidente Antonio Torres Martínez éste hizo viaje especial a Llera para entregársela pero Guadalupe prefirió quedarse en casa siendo comisionados para entregársela Gaspar Roque Rodríguez, Héctor Velázquez Martínez y quien esto escribe.
Cuando llegamos a su casa de allá de su querido San Juan él nos recibió con la atención de siempre y al entregarle la medalla, la tomó en sus manos y con ese carácter políticamente indómito que le caracterizaba la lanzó a la calle, pero que yo sepa jamás dejó de ser priista y así murió un veinte de noviembre siendo priista de corazón.
Por nuestra parte, Gaspar, Héctor y yo la recogimos e incluso hasta nos dio risa su actitud pero así era Guadalupe, por eso siempre lo respetamos y le reconocíamos su liderazgo pues él siempre era de lucha y de mucha convicción como eran también don Fidel Infante del municipio de González, Roberto Perales Meléndez, Héctor Treto Cisneros y La Chivita López de Ciudad Victoria, don Pantaleón Rodríguez de Casas, Alfonso Roque Rodríguez de Ocampo, Primo F. Reyes de Mainero y otros líderes de ayer que conformábamos lo que habíamos dado en llamar La Unidad Cívica de Tamaulipas y que en aquellos años traíamos pleito cerrado con el entonces gobernador don Enrique Cárdenas González, pero nunca dimos nuestro brazo a torcer y así seguimos hasta que la suerte nos favoreció con el tiempo. Traigo a cuento lo anterior porque hoy muchos cambian de ideología y de camiseta cuando pierden una elección interna o sea no saben ganar y mucho menos perder.
Digo lo anterior por Francisco Chavira, que sin tenerla perdida decidió abandonar a sus seguidores para sumarse al panista Francisco Javier García Cabeza de Vaca. Hoy sólo resta cuestionar, Y… ¿su gente lo seguirá en esta aventura?¿Qué pudo más en él, sus convicciones políticas o sus intereses personales?…. vaya usted a saber. HASTA MAÑANA Y BUENA SUERTE.




