BRASILIA, Brasil.- El Presidente interino de Brasil, Michel Temer, señaló que buscará la aprobación de una enmienda constitucional para reducir los gastos públicos y limitar el incremento de los desembolsos antes del pago de deuda a la tasa de inflación del año anterior.
Temer, en una reunión con los líderes de los partidos en el Congreso, anunció seis medidas, algunas de las cuales exigen aprobación parlamentaria, destinadas esencialmente a sanear las cuentas públicas y recuperar la confianza de los inversores.
“En el día de hoy tenemos una votación de una materia importante en el Congreso (…) Ése será el primer ‘test’. De un lado, el Gobierno, del otro lado, el Legislativo, para revelar al brasileño que estamos trabajando.
“Estamos presentando medidas iniciales para ajustar el gasto público y permitir una recuperación en el medio plazo”, añadió el Mandatario interino al explicar el conjunto de iniciativas.
Temer afirmó que el Tesoro Nacional será reforzado de forma inmediata con 100 mil millones de reales, unos 28 mil 571 millones de dólares, que le adeuda el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) y con 2 mil millones de reales, unos 570 millones de dólares, que están depositados en el Fondo Soberano Nacional.
Subrayó la importancia de que el nuevo modelo económico llame a la iniciativa privada para colaborar con el país.
Además, anunció un proyecto de flexibilización de las inversiones de la petrolera paraestatal Petrobras en la explotación de los campos submarinos Presal.
“Otro proyecto (del Gobierno) es la flexibilización de las inversiones de Petrobras en el Presal. Debemos dejar que ella decida si vale la pena o no participar. Petrobras precisa organizarse de acuerdo a sus intereses”, afirmó Temer.
El actual régimen de explotación obliga a toda empresa interesada en explorar el Presal -yacimiento en la región costera entre los estados de Río de Janeiro y Sao Paulo- a asociarse con la paraestatal.
Según el Gobierno provisional, esa condición reduce el interés de terceros de participar en la explotación y exige grandes volúmenes de inversión a Petrobras, que atraviesa dificultades financieras.
La flexibilización del régimen de explotación del Presal es rechazada sobre todo por el Partido de los Trabajadores (PT) y por sindicatos petroleros, que afirman que ello reducirá la renta pública obtenida de los campos submarinos.
El mandatario en ejercicio desde el 12 de mayo, añadió que un Gobierno interino no significa que el país tenga que parar.
Ayer, Temer realizó su primera visita al Congreso donde fue recibido por la Oposición al grito de “golpista” y hoy los adversarios del Gobierno prometieron obstruir la aprobación de las medidas económicas.
Al comentar la actitud del PT y otros partidos opositores Temer expresó que es natural que haya críticas pero también es importante que ayuden a gobernar.