Me llama poderosamente la atención, una nota difundida por la agencia reforma, en la cual, el Instituto Nacional Electoral, INE, declara que, “no hay riesgos para salir a votar”. El árbitro de la democracia descartó la existencia de focos rojos, en las 14 entidades, donde serán instaladas más de 68 mil casillas.
La postura del INE, contrasta con la de Jorge Carlos Ramírez Marín, representante nacional del PRI ante la máxima institución electoral, dicho funcionario revela que su partido detecta focos rojos en los estados de Tamaulipas, Veracruz, Oaxaca y Puebla. Especialmente, por las condiciones de violencia, y presión que pudiesen generarse. La mencionada nota puede leerse en el prestigiado portal Animal Político.
A partir de esta grave diferencia de criterios, entre el INE y el partido más poderoso del país, existe razonado temor de que las cosas, podrían salirse de control, el 5 de junio próximo. En mi papel de analista político tamaulipeco, me identifico con las declaraciones de Ramírez Marín, y me parece del todo irresponsable que el INE, esté cerrando los ojos a una situación inocultable, y del todo amenazante para la democracia de nuestro estado.
Lo que está ocurriendo en Tamaulipas, ya ha sido suficientemente documentado en los espacios mediáticos locales y del país. Pese a ello, el INE se empeña en restarle importancia a los hechos, y en esconder la cabeza ante las tácitas manifestaciones de violencia. Todo ello está generando que cientos de miles de ciudadanos vean con escepticismo, el proceso eleccionario que se avecina.
La pregunta aquí, es la siguiente: ¿A cuál de los dos partidos que se disputan el poder, podría dañar más, este escenario pantanoso, impredecible y de alto riesgo? ¿A los electores del odio que el PAN espera en las urnas, para que sufraguen a su favor? ¿O bien a la poderosa estructura de un priísmo, embalado y preparado para hacer valer su supremacía?
Las inercias del INE y del conjunto de instituciones encargadas de la legalidad electoral, podrían favorecer un clima de miedo ciudadano, de abstencionismo…. o lo que sería peor, de amedrentamiento.
LOS VIENTOS CAMBIARON A FAVOR DE BALTA
Después del evento en Tampico, donde Baltazar dio a conocer el decálogo del deslinde y los compromisos con la ciudadanía, se han dado reacciones diversas, la gran mayoría de ellas, favorables al proyecto del candidato del PRI a la gubernatura. Ahí mismo, en el sur, en una reunión con empresarios mediáticos de alto nivel, (prensa, radio y televisión), los ahí presentes, opinaron que, los planteamientos del abanderado priísta, llegan a tiempo, y resultan muy oportunos, de cara a la elección del 5 de junio.
Pero no solo la iniciativa privada, ha recibido con aplausos la lectura de estos diez puntos, fundamentales, en la conexión que tanto hacía falta, entre el candidato y el electorado, diversos actores políticos, tanto del PRI, como de la misma oposición, han llegado a ponderar la lectura positiva de este acontecimiento.
La candidata panista a la alcaldía de Matamoros, Verónica Salazar ha sido una de ellas. Recientemente escribió:
“Admiro y felicito la declaración de Baltazar Hinojosa Ochoa, es una muestra de honestidad y lealtad a su pueblo. Reconozco que no será bien recibida por mis compañeros del PAN, los cuales harán lo posible por desacreditarlo, y ofenderlo, pero creo firmemente que su decálogo es excelente, ya que expresa todo lo que los matamorenses y los tamaulipecos sentimos y queremos. Es evidente que con este acto, Baltazar Hinojosa Ochoa, va a subir más en las preferencias y en las encuestas, y tendremos que asumirlo”. “Ánimo, yo soy Vero y sólo te pido tu voto”, concluye.
La postura adoptada por Balta, y sus diez propuestas, están logrando el objetivo de empoderarlo ante el afecto y la confianza de la ciudadanía. La sociedad civil ha percibido en las palabras del candidato priísta, una gran dosis de sinceridad, y finalmente se ha logrado esa empatía que tanto hacía falta, entre el político que aspira a la gubernatura, y el electorado tamaulipeco.
Definitivamente, no es igual los vientos de cambio, que, los vientos cambiaron a favor de Baltazar.
MARCELA SIGUE MOVILIZANDO MILES DE MUJERES A FAVOR DE BALTAZAR
La esposa del candidato del PRI a la gubernatura, Marcela Ronquillo de Hinojosa, sigue trabajando intensamente por la causa política de su marido. Su más reciente demostración de pundonor y de entusiasmo proselitista y de organización, se acaba de dar en los municipios del altiplano tamaulipeco. Marcela encabezó una poderosa movilización de mujeres, simpatizantes del proyecto baltazarista, afines a las propuestas en materia de seguridad, educación, salud y desarrollo social.
