MATAMOROS, Tamaulipas.- A la crisis que se ha suscitado por la falta de recursos para apoyar a los repatriados, se ha sumado el incumplimiento del gobierno de Estados Unidos de efectuar las deportaciones en horas apropiadas, ya que remitió a decenas de mexicanos una hora antes de la medianoche.
Aunque ya se había normalizado la situación, los funcionarios estadounidenses dejaron en libertad por el Puente Internacional Puerta México a los connacionales, acción que los puso en riesgo, porque se efectuó en la noche y no en la tarde como se acordó en semanas anteriores.
El representante del módulo de Atención a Migrantes, Juan Antonio Vargas Sierra, expuso que las personas acudieron a documentarse ante el Instituto Nacional de Migración para después ser trasladados a la Central de Autobuses Lucio Blanco.
Mientras unos partieron a sus entidades de origen, el resto tuvo que pernoctar en la terminal porque carecían de recursos para adquirir el servicio y además el Instituto Tamaulipeco para los Migrantes no contaba con gasolina para llevarlos a la Casa del Migrante. Vargas Sierra expuso que las instancias nacionales continúan sin presupuesto para otorgar asistencia a los expulsados de Estados Unidos, por lo que se ha optado por contactar a los ayuntamientos o gobierno estatales de los puntos donde son originarios los implicados.
Agregó que en algunos casos se busca que las administraciones pongan el 50 por ciento del boleto del autobús y la Diócesis de Matamoros cubra el otro porcentaje con la finalidad de
aminorar la problemática.
El miércoles arribaron en avión a la frontera 59 mexicanos, aunque la cifra llegó a 91 por las liberaciones que hizo la Patrulla Fronteriza por esta ciudad, situación que propició un aumento en la actividad.
