CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Dos sexagenarios decidieron escapar por la puerta falsa del sucidio, uno de ellos en esta capital, mientras que el otro en el municipio de Antiguo Morelos.
Según informes por la comandancia del estado, se confirmó que el suicidio ocurrió a las 07:20 horas, en la calle república de Paraguay y Juan Alvarez de la colonia Solidaridad.
El ahora occiso fue identificado como Silvestre Bautista Martínez, de 69 años y quien tenía su domicilio en la colonia Nuevo Amanecer.
El hombre para poder quitarse la vida utilizó un mecate de nylon y lo amarró a un árbol, para posteriormente la otra extremidad atarla a su cuello y dejarse caer.
Aparentemente los motivos de su determinación fueron problemas personales.
El segundo caso el comandante de la Policia Ministerial del estado Guadalupe Jimenez de Hoyos informó, que el ahora occiso respondía al nombre de Emiliano Martínez Castillo, quien contaba con 66 años de edad.
El macabra hallazgo se registró poco despues del mediodia en un domicilio del ejido Verdines, del municipio de Antiguo Morelos.
Las autoridades dijeron que la víctima utilizó un cable de nylon, color amarillo, el cual ato a una viga del techo y el otro extremo a su cuello, para posteriormente subirse a la cama y dejarse caer, logrando así su plan.
El cuerpo fue identificado por Hector Manuel Martinez Morales de 44 años de edad, con domicilio en Barrio El Callejon de Antiguo Morelos.
De acuerdo con las primeras investigaciones, familiares de la víctima llegaron a visitar a don Emiliano, pero al ver que la puerta estaba cerrada procedieron a tocar sin obtener respuesta alguna.
Comentaron que al entrar se percataron que el sexagenario colgaba tétricamente del techo de la casa y ya no presentaba signos de vida.
Inmediatamente dieron aviso a la central de emergencia 066, llegando enseguida elementos de la Policia Estatal Fuerza Tamaulipas quienes confirmaron el deceso.
Familiares del ahora occiso dijeron que Martínez Castillo no padecía de alguna enfermedad.
Al lugar de los hechos arribaron elementos de la Policia Ministerial del estado, asi como peritos en técnicas de campo de la Unidad Regional de Servicios Periciales, quienes al iniciar las investigaciones encontraron un recado póstumo.
Fue el agente primero del Ministerio Público quien se encargó de dar fe de los hechos y ordenó que el cuerpo del suicida fuera trasladado a una funeraria para que se le practicara la autopsia de rigor.




