1.- La vida se divide sólo en dos partes: la horrible y la desdichada.- Woody Allen.
2.- La vida no es una maldición tras otra; es la misma maldición que se repite y se repite.- Edna St. Vincent Millay.
3.- ¿Qué se puede esperar de un día que comienza con tener que levantarse?.- Wendy R. Ellner.
4.- Siempre comienzo por leer la última página de un libro; así, si muero antes de terminarlo, sabré el final.- Nora Ephron.
5.- El hecho de que seas paranoico no quiere decir que no te estén buscando.- Autor desconocido.
6.- No pidas problemas prestados; ellos pronto te encontrarán.- Autor desconocido.
7.- Cuanto más conozco a los hombres, más me gustan los perros.- Madame de Stael.
8.- Los hombres son como los inodoros; o están ocupados o llenos de lo que ya sabemos.- Autor desconocido.
9.- La diferencia entre el genio y la estupidez, es que el genio tiene sus límites.- Autor desconocido.
10.- Confía en todo mundo, pero corta tú la baraja.- Peter Dunne.
11.- Es una tontería seguir aparentando que en fondo todos somos hermanos. La más probable verdad es que en el fondo todos somos caníbales, asesinos, traidores, mentirosos, hipócritas y cobardes.- Henry Miller.
12.- La primera mitad de nuestra vida nos la arruinan nuestros padres y la segunda mitad, nuestros hijos.- Clarance Darrow.
13.- El amor es fuego, pero nunca puedes saber si te va a calentar el corazón o a quemarte la casa.- Joan Crawford.
14.- El hombre es un encanto dos veces en la vida; el día que te casas con él y el día que lo entierras.- Jane Bartlett.
15.- La mujer llora antes de la boda, el hombre después.- Autor desconocido.
16.- El matrimonio es la única guerra en la cual se duerme con el enemigo.- Autor desconocido.
17.- El matrimonio es una novela romántica en la cual el héroe muere en el primer capítulo.- Autor desconocido.
18.- Los puestos públicos son el último refugio de los incompetentes.- Boles Penrose.
19.- Este mundo es una comedia para quienes piensan y una tragedia para quienes sienten.- Horace Walpole.
20.- No tomes tan en serio la vida… no es permanente.- Kathy Holder.