TAMPICO, Tamaulipas.- Citarán a comparecer a él delegado regional de seguridad pública, José Marines ante el Cabildo para cuestionarlo sobre la ola de robos.
El regidor, Julián Zorrilla, dijo que existe un malestar por los incidentes delictivos que han azotado y que siguen sin parar.
«Es necesario que el delegado regional acuda a dar una explicación de lo que está pasando en la ciudad, la ola de robos se encuentra imparable, por lo que necesita decirnos que es lo que está pasando», comentó el integrante del Cabildo.
En lo que va del año se han presentado un promedio de 1,365 incidentes siendo el mes de abril el más crítico, por lo que existe preocupación de parte de la ciudadanía.
Y del 17 del mes de junio se agudizaron los delitos, van por lo menos 5 bancazos que se han presentado.
«Tenemos que pedirle que cambie la estrategia, por qué es necesario y no podemos dejar que se encuentre a la deriva la seguridad en los últimos tres meses que le restan a los Ayuntamientos», explicó.
Habrán de mantener «bajo la lupa» al encargado de seguridad pública en la zona metropolitana.
Y le pedirán que preste el menor número posible de elementos para vigilar otras dependencias al igual que las patrullas en estos momentos de emergencia.
Se arman contra la inseguridad
El 90 por ciento de los afiliados a la Canaco han de invertir en reforzar sus medidas de seguridad para «blindarse» contra la ola de robos y asaltos.
Han contratado de seguridad, circuitos cerrados y alarmas para resguardar sus instalaciones durante la madrugada, dijo José a Luis del Ángel.
«Entre las medidas que tomamos son circuitos cerrados, vigilantes, más seguridad, algunos negocios han colocado alarmas», comentó.
Las joyerías, restaurantes, casas de préstamo, bancos son los que tienen gendarmes privados para enfrentar la ola de inseguridad.
«Se han invertido mucho en seguridad, por lo menos un 90 por ciento de nuestros afiliados tienen cámaras, un circuito cerrado cuesta ir muy barato 5 mil pesos, más lo que te cuesta el monitoreo, un vigilante, se incrementa», dijo.
Existe temor entre los integrantes del sector comercial de ser visitados por los amantes de lo ajeno, por lo que prefieren gastar ante la falta de vigilancia por parte de las autoridades policiacas.
El 90 por ciento de los 380 que tiene afiliados la Cámara Nacional de Comercio no han tenido otra salida que invertir para sentirse seguros.