MATAMOROS, Tamaulipas.- El periodo vacacional de verano dará un respiro al comercio del Valle del Sur de Texas que tiene en los mexicanos a sus principales consumidores, pues este fin de semana en Reynosa y Matamoros se pudo observar una mayor actividad de los cruces internacionales.
Las largas filas que se formaron, sobre todo en el paso peatonal, habla de una mayor presencia de consumidores en el comercio texano, donde los últimos fines de semana pocos mexicanos llegaban.
Pese a la alta paridad del peso frente al dólar, que alcanza los 18.60 pesos por unidad y que en el Puente Reynosa-Hidalgo por ejemplo eran pocas las casetas abiertas para cruzar los fronterizos, algunos visitantes de otras ciudades de Tamaulipas y del Noreste hicieron pacientemente las filas que los llevarían a los Estados Unidos.
Este comportamiento se espera en las próximas semanas cuando se juntan los periodos vacacionales de estudiantes y de la burocracia estatal que pueden aprovechar para acudir de compras o visitar a sus familias con los gastos que esto representa para el comercio de esa región.
En Matamoros los tiempos de espera fueron menores que en la zona de Reynosa, pero igualmente se incrementaron comparado con los días anteriores en que no se tenían que invertir más de 30 minutos.
En promedio después del mediodía los tiempos de espera eran de 45 a 50 minutos, pero por la tarde-noche se redujeron prácticamente a cinco o 10.
En la vecina ciudad los tiempos de espera que los automovilistas utilizaban en atravesar el Puente Internacional Reynosa-Hidalgo eran mayores debido a que sólo cuatro de las 10 casetas de acceso estaban abiertas y tenían que someterse a una estricta revisión, tanto de documentos como del vehículo, por parte de los oficiales norteamericanos.
También se pudo ver una larga fila de personas a pie esperando hasta casi dos horas cruzar el punto de revisión aduanal del lado americano.