CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Las remesas familiares a Tamaulipas continuaron bajando a comparación del total nacional y, en el primer semestre de 2016 sumaron 320 millones de dólares, el 2.44 por ciento de los 13 mil 156 millones de dólares del total nacional.
El descenso se da a pesar de que Tamaulipas se ha convertido en uno de los mayores expulsores de población, junto a Oaxaca y Morelos.
Las remesas siguen como una de las dos principales fuentes de divisas captadas en Tamaulipas y casi el mismo monto de la inversión extranjera directa.
La caída del tipo de cambio combinada con una inflación anualizada de poco menos del tres por ciento, ha hecho que las familias que reciben remesas tengan un mayor poder de compra.
Según datos de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica 2014 (Enadid) realizada por el Inegi, solamente el 27 por ciento de los que han emigrado lo han hecho por causa de la violencia, un 5.5 por ciento no manifestó ninguna causa.
Los tamaulipecos que han regresado del exterior no han retornado a Tamaulipas y emigran en busca de empleo a Nuevo León, Coahuila o el Distrito Federal.
La Enadid señala que en los últimos cinco años, por cada 1.7 personas que llegan a vivir a Tamaulipas, 4.7 salen de la entidad, cifra solamente superada por el Distrito Federal.
Cerca de 160 mil personas que vivían en Tamaulipas en 2009 han emigrado hacia otras entidades del país y 18 mil a otro país, la mayor parte a Estados Unidos.
Un tercio de la población expulsada manifiesta haber salido debido a la inseguridad y más de un quinta parte, 39 mil, en busca de empleo.
A la fecha se estima que hay unos 18 mil tamaulipecos en Estados Unidos y la mitad de estos envían al menos una vez por año una remesa de 150 dólares en promedio.
Al caer en un bache la bonanza petrolera en Texas comenzaron a caer las remesas familiares a Tamaulipas, las cuales han bajado consecutivamente contra el trimestre anterior en cada uno cinco de los últimos cinco trimestres y en el último, el sexto, abril a junio de 2016, el crecimiento contra el trimestre anterior fue de tan sólo el 2.8 por ciento, luego de haber caído 12 por ciento de enero a marzo de este año.
En los primeros años de esta década, mientras los volúmenes totales a México de envíos de dinero a familias disminuían, en Tamaulipas crecía debido a un mayor número de trabajadores migratorios y a la bonanza petrolera texana, que creó de enero de 2010 a diciembre de 2014 un millón 340 mil empleos.
En enero de 2010 la industria extractiva y minera en Texas empleaba a 191 mil 300 persona y para diciembre de 2014, cuando empieza la caída libre del precio internacional del petróleo, había 319 mil 500, un crecimiento del 67 por ciento en cinco ejercicios.
Desde enero de 2010 el envío de dinero desde el exterior a familias tamaulipecas había mostrado un incremento y ese año se recibieron 402 mdd y en 2011 fueron 445 millones de dólares.
Para 2012 la cifra anual llegó a 485 millones del billete verde y 2013 dio un brinco hasta 709 millones de dólares y, finalmente en 2014 se recibieron en los 12 meses 833 millones de dólares.
Desde 2012 las remesas familiares desde el exterior han sido la primera fuente de divisas en Tamaulipas, por lo que su disminución ha afectado al mercado interior y junto con la inversión extranjera directa han superado los mil 200 millones de dólares anuales en promedio.
Con 180 mil emigrantes, sin contar la cifra negra, Tamaulipas es junto a Chihuahua, el estado del norte del país que más pobladores abandonan su lugar natal por causa de la inseguridad.
Aunque no hay datos exactos, en municipios como Hidalgo, Jiménez, Camargo, Mier, la población ha disminuido del 15 al 33 por ciento en los últimos años.
Entre 2010 y 2016, Tamaulipas pasó de ser uno de los estados que captaba población a ser un estado que expulsa pobladores hacia otras entidades o hacia otro país, especialmente Estados Unidos o Canadá.
Mientras en 2009 Tamaulipas era un estado del que salía menos gente de la que llegaba a vivir, para 2015 es ya la segunda entidad del país de donde sale mucha más gente de la que llega.
La diferencia entre migrantes que salen del estado y los que llegan, fue negativa e incluso más acusada que los estados pobres, tradicionalmente fabricantes de migrantes como Guerrero, Chiapas, Oaxaca.