SAN FERNANDO, Tamaulipas.- Ante las altas temperaturas que se registran han ocasionado que los reptiles peligrosos abandonen sus madrigueras y busquen refugios en sitios frescos, lo que viene a ocasionar que al ser molestadas por personas, estas sean atacadas.
Paramédicos del cuerpo de bomberos han atendido a dos personas de mordeduras de víbora al parecer de cascabel, proporcionándoles los primeros auxilios y posteriormente trasladarlos al área de urgencias del Hospital General.
El primero en ser llevado al nosocomio local fue Rolando García García, de 48 años de edad, originario de Tegucigalpa, Honduras, quien presentaba mordedura de una víbora en la extremidad derecha.
A decir del centroamericano, se establece que él caminaba por una de las brechas aledañas al puesto de revisión de control milita denominado “La Coma” o El Ribereño”, ubicado en el kilómetro 158 de la carretera federal Matamoros-Victoria, cuando fue atacado por un reptil, presuntamente una de cascabel.
Aun cuando se encontraba mal de salud, Rolando García García, logró llegar al puesto de control y revisión militar, para pedir auxilio, por lo que de inmediato se reportó el caso a los paramédicos de la unidad de Protección Civil.
Tras recibir los primeros auxilios, el centroamericano, fue llevado a bordo de una ambulancia a la unidad de Protección Civil al área de urgencias, donde estuvo internado en área de urgencias del nosocomio local.
El segundo caso que se tiene documentado es el de la menor Jennifer Sarahí, de tres años de edad, con domicilio en el ejido los Vergeles, quien fue atacada por una serpiente de las llamadas de cascabel, cuando se encontraba en el patio de su vivienda.
La menor fue trasladada al nosocomio local por sus familiares a bordo de un vehículo particular pero a la altura del ejido San Vicente, fue interceptado por los paramédicos que lo canalizaron al nosocomio local, donde estuvo bajo observación médica.
Ante estos casos que se han registrado se viene pidiendo las autoridades correspondientes a la población en general a tomar precauciones para evitar ataques de estos reptiles que están saliendo de sus madrigueras por las altas temperaturas que se presentan.