CIUDAD DE MÉXICO.- La Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), a través de su Laboratorio de Genética Molecular y Ecología Evolutiva, de la Facultad de Ciencias Naturales, desarrolla un proyecto de investigación que busca explicar las causas del padecimiento de cáncer anómalo en lobos marinos (Otaria flavescens) silvestres ubicados en California, Estados Unidos.
El proyecto está a cargo de la profesora investigadora de la Facultad de Ciencias Naturales de la UAQ, Karina Alethya Acevedo Whitehouse, quien informó que la inquietud de estudiar estos animales surgió durante su vida académica en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en la que, dijo, tuvo la oportunidad de descubrir por primera vez este fenómeno.
“Estudié medicina veterinaria. Trabajé en el Hospital Veterinario de Especialidades en Pequeñas Especies como voluntaria varios años y tuve la fortuna de entrar de oyente a una materia que era de medicina en fauna silvestre con el doctor Carlos Godínez Reyes —quien fue mi mentor en la licenciatura— y que trabajaba con lobos marinos. En un crucero científico donde yo iba encargada de hacer las necropsias de los animales que encontrábamos, me tocó hacer la de una hembra adulta, recién muerta, estaba invadida de un cáncer muy agresivo; de ahí mi primera publicación e interés por el tema”, recordó.
Acevedo Whitehouse indicó que desde los años 80 se comenzaron a reportar casos aislados de este carcinoma muy agresivo en el tracto urogenital de los lobos marinos; sin embargo, dijo, en los últimos años se ha dado a conocer un aumento significativo de casos en esta especie, principalmente en las costas de California, Estados Unidos.
“Este carcinoma se comporta muy parecido al cáncer cervicouterino en la edad en la que se presenta, la agresividad y la mortandad. Pero ahorita estamos hablando de una incidencia del 25% de los animales que varan en las costas de California, animales adultos que mueren y cuando se les hace necropsia se identifica este cáncer. Esto es terrible, porque es muy alto e implica que no sabemos cuál es la prevalencia en vida libre. Resulta preocupante desde el punto de vista de la especie y de la salud del ambiente, pero también la oportunidad única de estudiar un proceso, como el cáncer, en un organismo fuera del laboratorio”, puntualizó.
Ante esto, la profesora investigadora de la Facultad de Ciencias Naturales informó que la UAQ, a través del Laboratorio de Genética Molecular y Ecología Evolutiva, lleva a cabo un estudio, apoyado por la Convocatoria de Investigación en Fronteras de la Ciencia del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), donde se buscar identificar y caracterizar componentes asociados al cáncer que padecen los lobos marinos de California.
“En este estudio buscamos virus o bacterias que pudieran estar ligadas a este padecimiento, hacemos en estos animales una especie de Papanicolaou, como el que hacen a las mujeres. Fue interesante porque encontramos que hay virus presentes incluso en las crías, lo cual hace que te cuestiones si realmente este virus está implicado en la patogenia, a lo mejor es un virus que lleva muchísimo tiempo con estos animales. Ubicamos también que tienen células ya transformadas desde muy pequeños, parece ser que el lobo marino transforma su epitelio genital muy fácil, lo que genera que tenga estos cambios precancerígenos muy fácilmente”, sostuvo.
Acevedo Whitehouse afirmó que este estudio se lleva a cabo en las costas de California porque es la zona donde se han identificado los casos de cáncer, a diferencia de otros lugares como México donde no se cuenta con reportes de este padecimiento en el lobo marino.
“De acuerdo con los estudios, este cáncer solo se ha reportado en California, y el lobo marino no solo se encuentra ahí, sus lugares de reproducción están desde California, las Islas del Canal, que están a la altitud de Los Ángeles, en el brazo de Baja California y dentro del golfo de California; nunca se ha reportado ese cáncer en aguas mexicanas. Ahorita ya caracterizamos esas lesiones en todo el golfo de California y en el Pacífico.
En aguas mexicanas algo pasa, yo creo que lo que ocurre es una oncovigilancia inmune muy buena, donde el organismo revierte esas células y no se desarrolla el cáncer”, destacó.
Por ello, dijo, el grupo de investigación del Laboratorio de Genética Molecular y Ecología Evolutiva de la UAQ estudia, entre otros factores, los niveles de contaminación por pesticidas y la industria del plástico en esa zona marítima de California, que, señaló, es mucho más alta que en aguas mexicanas.