Todo depende del cristal con que se mire, o el sabor de boca con el que esta mañana despierten los aficionados al futbol tras una jornada más en el futbol mexicano tanto en la Liga MX como en el Ascenso MX que nos arroja saldos de todo tipo.
El sábado por la noche en una edición más del Clásico Nacional, dio gusto ver un partido donde el Guadalajara jugó auténticamente como lo dicta la tradición, como lo marcan los cánones de la filosofía rojiblanca: futbol alegre, dinámico y cien por ciento vertical.
El Rebaño Sagrado salió inspirado en un uniforme retro que emuló al chiverío del cual muchos -me cuento- nos enamoramos y que a últimas fechas daba más pena que satisfacciones.
De mantenerse en esa línea futbolística o tocados por cierta gracia que les motivó como la noche del sábado en el Estadio Azteca, el Guadalajara podrá dar mucho de que hablar en este torneo que empieza a madurar y como es costumbre el morbo nos hace ir perfilando a los favoritos, como a los descartados.
De no ser una simple ilusión y si se confirma que Matías Almeyda por fin le supo sacar todo el jugo a su joven plantel, ¡aguas con las Chivas!.
Súmele a eso que todo indica que no hay vuelta para atrás y que a más tardar el miércoles el delantero oriundo de Ciudad Victoria, Alan Pulido Izaguirre se estará incorporando al equipo más popular de México; los rumores tomaron fuerza desde el viernes y ayer volvieron a encenderse las redes sociales ya que el menor de los hijos del “Pulpo” Pulido, ex portero de Correcaminos, compartió una fotografía donde muestra una maleta carísima Louis Vuitton, lo cual indicaría que viene de regreso desde Grecia a México, para vestirse en la camiseta más querida del país y más allá de nuestras fronteras.
No sé en qué momento me perdí, tengo siguiéndole la huella a Alan como a su hermano Armando al menos diez años, desde que partieron a Tigres, jugaban en la división de Ascenso, cuando jugaron juntos por primera vez en el Estadio Azul en Primera División, el llamado de Alan a Selección Mexicana y su convocatoria al Mundial, además de por supuesto la novela con Tigres; es aquí donde no encuentro el parte oficial sobre la resolución del litigio entre ambas partes.
No es que sea mal pensado, pero para resolverse tendría que haber una fuerte suma de dinero que Tigres reclamaba por la cláusula de rescisión de contrato, y a eso súmele el valor del jugador que en sus últimas presentaciones con el Olympiacos hizo goles y que esa le toca pagar al Guadalajara.
Ojalá que el miércoles, día en que se supone lo presentarán en Verde Valle, se aclare el panorama porque no he de negarlo, que gusto me da que dos tamaulipecos, orgullosamente victorenses, jueguen con uno de los equipos grandes del país, pero creo también que hay dudas por resolver.
Y ya que hablamos de tamaulipecos ¡qué pena nuestros equipos!; Correcaminos perdió en casa y por supuesto, Pepe Treviño encontró en Quetzalli Alvarado el mejor pretexto para justificar su descalabro y sus chambonadas. Mientras que el Tampico-Madero parecía sumar su primer triunfo del torneo y nada, al ’93 le sacaron el empate.
Bajo estas circunstancias, dos equipos peleando los últimos lugares de la tabla, no me quiero ni imaginar el bodrio de Clásico Tamaulipeco que tendremos el próximo 9 de septiembre en el Marte R. Gómez.
@luisdariovera