CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Luego de las reformas a la ley, el fondo de pensiones de Tamaulipas cuenta con suficiencia presupuestaria hasta el 2028, comentó el Director de pensiones del IPSSET, Juan Pablo González Rodríguez.
“De acuerdo al último estudio actuarial, el fondo de pensiones se fortaleció y ahora el año de insuficiencia es el 2028; antes de la reforma, el año de insuficiencia era el 2018, por lo que no habría recursos económicos para hacer frente al pago de pensiones”.
Las reformas, que entraron en vigor en el 2015 contemplaron un incremento en las aportaciones, además del establecimiento de una edad de jubilación, lo que anteriormente no existía y al dejar de trabajar a una edad temprana, se prolongaba el pago de pensiones, debido al incremento de la esperanza de vida.
Recordó que en el incremento de las aportaciones a partir del 2015, es de un punto porcentual para el trabajador y dos puntos porcentuales para el patrón, en este caso el Gobierno del Estado, hasta llegar al 32 por ciento, lo que se alcanzará en el año 2020.
“Actualmente se pagan mensualmente a cerca de 6 mil 700 pensionados, aproximadamente 60 millones de pesos, aunque hay algunos meses en que se pagan más porque se contemplan aguinaldos, canasta básica o algunos retroactivos”.
De acuerdo con el funcionario estatal, se estima que este año se tendrán 500 nuevas altas de pensiones, registrando hasta este mes, poco más de 240 nuevas pensiones.
El Director de pensiones del IPSSET explicó que para no volver a caer en insuficiencia y tener que recurrir a un rescate por parte del Gobierno del Estado para el pago de pensiones y jubilaciones, en la nueva Ley del IPSSET se estableció que las leyes de seguridad social deberán ajustarse cada cuatro años, para adaptarlas a las realidades que se están viviendo.
“La ley se debe ir adecuando a este tipo de realidades donde la esperanza de vida va a seguir incrementándose, porque actualmente el promedio de la esperanza de vida que es de 73 y 75 años en México y está va a seguir incrementándose”.
González Rodríguez apuntó que hace un mes y una semana falleció la jubilada más longeva que se tenía registrada en el Instituto, “tenía 105 años, ella fue maestra, vivía en Nuevo León y durante más de 40 años se le pagó una pensión”, reiterando que es precisamente por el aumento en la esperanza de vida que se tiene, por lo que deben realizarse ajustes a los fondos de pensiones y de esta manera hacerlos solventes económicamente.