CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Las nuevas administraciones municipales han encontrado las finanzas en estado lamentable, contratistas y proveedores hacen fila para recibir pagos de obras o pedidos de los que no hay memoria contable, en Matamoros tuvieron que cancelar cuentas bancarias porque la administración saliente se llevó las chequeras para seguir haciendo pagos, y además, los muy endeudados municipios deberán contratar más deuda para pagar los aguinaldos.
“Nos dejaron una pesada deuda, pero tenemos que sacarla, tenemos que aligerarla, tenemos que sanear las finanzas”, dijo el actual Primer Síndico Municipal en Reynosa, José Alfredo Castro Olguín.
Los municipios 2013-2016 habrían heredado a sus relevos un gran desorden administrativo que oculta más de mil millones de pesos en obras y proveedores fantasma, deuda contingente estimada en 750 millones de déficit fiscal del 2015 que se cubrió con anticipos de participaciones de 2016, y una deuda documentada por mil 660 millones de pesos, una suma que va de unos tres mil 500 a cuatro mil millones.
Un agujero fiscal enorme que sólo en ingresos presupuestales superar los tres años de participaciones del Fondo de Fomento Municipal para los 43 municipios (615 millones en 2016) hay adeudos a contratistas, proveedores, bancos y participaciones mal utilizadas, y deudas sin documento alguno que no se sabe cómo, por qué o para qué, fueron contraídas porque no hay contratos de obra ni expedientes para soportar la
requisición y pedido.
Sólo los ayuntamientos 2013-2016 de Reynosa, Matamoros, Nuevo Laredo, Victoria, Tampico, Altamira, Ciudad Madero, Río Bravo, El Mante, Valle Hermoso, San Fernando, González, Aldama, Miguel Alemán, Tula y Soto La Marina, culminaron los tres primeros trimestres de 2016 con déficit en las participaciones que llegó a 892 millones de pesos.
Además, los municipios tienen una deuda histórica documentada a largo plazo de 270 millones de pesos avalados por el Gobierno estatal y de
mil 350 millones avalados por participaciones futuras.
Al 30 de septiembre los municipios acumulaban pasivos no documentados por unos 900 millones de pesos, y se infiere que los ahora ex alcaldes metieron dinero público a las campañas y en los municipios donde hubo cambio de partido, no van a asumir deuda por obras pagadas que físicamente no existen, pagos a proveedores fantasmas, deudas por equipos y materiales que nunca se recibieron.
El nuevo presidente municipal de Matamoros, Jesús de la Garza Díaz del Guante, anunció que un despacho contable externo hace una auditoría para conocer exactamente cuál es la situación financiera y que se acogerán al plazo de 60 días que otorga la Ley de Entrega y Recepción, antes de asumir la responsabilidad sobre la Hacienda Pública.
“La Ley nos concede 60 días para hacer observaciones sobre las condiciones en que se recibió la administración”, dijo De la Garza Díaz del Guante.
Si después de los 60 días el actual Ayuntamiento no hace ninguna observación a lo que encontraron, se dará como entendido que las nuevas autoridades estuvieron conformes.
En Reynosa el déficit de operación total, con documentos, con pagos a empresas fantasma, con desvíos de fondos, puede sumar unos mil millones de pesos, según estima el nuevo primer síndico, José Alfredo Castro Olguín, aunque dijo que para conocer exactamente el grado de endeudamiento requieren un análisis profundo y detallado de las arcas municipales y de las demás dependencias.
Eso ya se está haciendo fue una instrucción de la Presidenta Maki Ortiz, yo estoy de acuerdo en esa disposición y ya veremos en cuanto se concluyan esas auditorías y lo que te quiero decir es que no vamos a solapar a nadie, quien esté cometiendo o haya cometido irregularidades o ilícitos a nadie vamos a solapar”.
Por si fuera poco, las nóminas en casi todos los municipios están infladas con docenas de aviadores, muertos y fantasmas, y no hay memorias contables prácticamente de nada, mientras los acreedores hacen filas para cobrar y los ayuntamientos actuales no saben por qué o de qué se les debe.
En Tampico la presidenta municipal, Magdalena Peraza Guerra, dijo que hace tres años recibió una deuda de 180 millones de pesos que tuvo que sanear mientras hacía nueva obra pública y administraba el municipio y para este nuevo periodo, 2016-2019, encuentra 280 millones.
“Dejó (Gustavo Torres) de pasivo a proveedores 136 millones más los 22 y medio del aguinaldo, estamos hablando de 158 millones de pesos, más lo de los mercados que son 128 millones de pesos, aunque lo de los mercados es una deuda que va a 10 años”, comentó.
En Victoria el nuevo presidente municipal, a quien le toca “bailar con la más fea”, pues el ex alcalde Alejandro Etienne Llano, quien le deja de herencia más de 30 millones de deuda contingente, 29 millones de déficit del presupuesto 2015 y obras fantasmas por más de 30 millones, es ahora el coordinador de la minoría priista y seguramente parte de quienes revisen sus cuentas públicas.
Los lamentos de los que llegan.
Dejan Matamoros sin historia contable
MATAMOROS, Tamaulipas. -No se sabe cuánto del mil 228 millones de presupuesto autorizado para Matamoros este año y sus ampliaciones, fueron ya erogados, pero como la ex presidenta municipal, Leticia Salazar, no permitió una entrega recepción debida ni entregó estados contables, el nuevo Ayuntamiento se amparará en la Ley de Entrega Recepción que le da 60 días para hacer observaciones y contrató a un despacho contable externo, para que haga una auditoría.
Jesús de la Garza Díaz del Guante, el presidente municipal actual, dijo que la administración anterior no entregó ningún informe financiero ni archivo de los movimientos financieros, inventario de bienes, estados de cuenta al 30 de septiembre, por lo que desconoce también cuántas obras están en proceso, cuáles son los avances de obra, qué adeudos hay con constructoras y proveedores, y tampoco, cuál es el inventario de bienes muebles, inmuebles, materiales, equipos y maquinaria del Ayuntamiento y dónde están.
Algunos Regidores del PAN de la anterior administración estiman que se dejó una deuda de unos 300 millones de pesos, De la Garza Díaz del Guante, dijo, que no pueden confirmar eso, porque carecen de información financiera, pues la noche del 30 de septiembre, cuando acudió para la entrega-recepción y firmar los libros correspondientes, Leticia Salazar Vázquez, les dijo que no dejaba ninguna deuda pendiente, pero además de su palabra no entregó ninguna documentación de los manejos financieros para comprobarlo.
“No solamente no dejamos deudas, sino que pagamos las deudas que nos dejaron”, asegura un vídeo en la cuenta de Facebook de Salazar Vázquez.
El alcalde De la Garza Díaz del Guante, dijo que están a tiempo para hacer una auditoría y conocer exactamente la situación financiera.
“La Ley nos concede 60 días para hacer observaciones sobre las condiciones en que se recibió la administración”, dijo.
Si hubo malos manejos, se denuncien: Regidores del PRI
Regidores de la fracción del PRI, manifestaron que es preocupante que no haya información financiera para conocer el estado de la Administración Municipal y consideran que se actuó con dolo.
Asegura que en el primer arqueo que se hizo a la Tesorería Municipal, el sábado 1 de octubre por la mañana, se descubrió un faltante de 120 cheques, que presumen se llevó el anterior Tesorero, Eleazar González, y que ese 1 de octubre aún los estaba girando.
La Tesorería procedió a cancelar las cuentas de los bancos y en lunes empezaron los reclamos por cheques rebotados, que indebidamente se pagaron fuera de la dependencia.
El anterior Contralor Municipal, Rodolfo Simón, afirman, se presentó en Tesorería para conocer los motivos por los cuales no se estaban pagando los cheques y se le dijo porque fueron extraídos ilegalmente de la Tesorería.
Debe hacerse una auditoría a la JAD
En Junta de Aguas y Drenaje de Matamoros hay una deuda de corto plazo de 286 millones de pesos, de acuerdo con los informes del Consejo. Christian Pérez, consejero de la JAD, dijo que el organismo está en quiebra, porque se adeuda a proveedores y contratistas y hay adeudos por cuotas al IMSS y el Infonavit.
Rodríguez Padrón mostró documentos del último estado financiero de la JAD que se presentó en enero del 2014, cuando concluyó el gobierno del alcalde, Alfonso Sánchez Garza y la deuda de corto plazo era de 150 millones de pesos, la que ahora se disparó a 286 millones de pesos, lo que refleja un aumento de casi el 100 por ciento.
El Registro Estatal de Deuda señala al 30 de junio que la JAD tenía pasivos documentados a largo plazo por 230 millones de pesos al último de junio de este año.
Gustavo Torres deja pasivo de 359 mdp
El pasivo total que heredó Gustavo Torres Salinas a su relevo, Magdalena Peraza Guerra, fue de 359 millones de pesos, el doble que dejó Óscar Pérez Inguanzo en 2010.
Peraza Guerra dijo que la primera vez que tuvo este cargo tuvo que pagar 180 millones de deuda entre documentada y contingente y encontró la administración municipal en “números rojos”.
“Dejó de pasivo a proveedores 136 millones más los 22 y medio del aguinaldo, estamos hablando de 158 millones de pesos, más lo de los mercados que son 128 millones de pesos, aunque lo de los mercados es una deuda que va a 10 años”, comentó la alcaldesa.
Ahora tiene que pagar facturas por 74 millones que dejó pendientes la administración de Gustavo Torres.
“La verdad, no me la esperaba esta deuda (de 359 mdp), la verdad pensé que era menor, pero bueno de las adversidades surgen fortalezas…
Claro que afecta mi plan de trabajo, imagínate que no tienes circulante para poder trabajar en cosas mínimas”, dijo Peraza Guerra.
Además, el 33 por ciento de la flotilla de servicios públicos son chatarra, están activas 22 de las 35 unidades y una ciudad completamente sucia.
Victoria, obras fantasma
En Victoria la administración municipal que concluyó el 30 de septiembre pagó obras de pavimentación que nunca se realizaron y otras que al poco tiempo de haberse entregado, ya presentan serios daños, y su calidad no corresponde a los fondos presuntamente aplicados.
Fueron cinco las constructoras que recibieron los mayores beneficios en licitaciones de obra pública destinadas a pavimentación, algunas incluso, obtuvieron asignaciones directas de proyectos, acumulando una suma de 14 millones de pesos.
En la Ampliación Pedro Sosa se encuentra la calle General Antonio Canales, en la que se invirtió más de un millón de pesos para su pavimentación. El problema es que la obra registrada oficialmente como terminada, nunca se realizó, a juzgar por el estado de la calle y los testimonios de quienes ahí habitan.
De acuerdo a las pocas cuentas publicadas en la Internet, Victoria cerró con un déficit de operación de más de 30 millones que arrastra desde el 2015 y con una deuda contingente de otros 30 millones.
Los vecinos del tramo localizado entre las calles Ernesto Higuera y Francisco Higuera rechazan que ahí se haya realizado algún trabajo y manifiestan su enojo por el gran deterioro que existe en el asfalto, que hace difícil la circulación por esta calle.
“Llevo viviendo años aquí y la última vez que pavimentaron esta calle fue hace 14 años”, dijo Don Emilio, un vecino del sector.
La calle General Antonio Canales, de la colonia Ampliación Pedro Sosa fue asignada al contratista Eduardo Benítez Garza, en el año 2013, con la licitación de número 012-DGOSP-FOPEDARIE-2012.
Ante la evidencia de pavimentaciones “fantasmas” y en mal estado que heredó la administración anterior, el alcalde Óscar Almaraz Smer declaró que los órganos de control federal y estatal son los encargados de sancionar a las constructoras que se les asignó este trabajo millonario.
