1.- Al candidato que tiene suerte, hasta el gallo le pone huevos.
2.- Muchos hablan de Robin Hood, pero pocos saben manejar el arco.
3.- Quien no puede morder, no tiene porqué enseñar los dientes.
4.- Al candidato rico, hasta el diablo le hace regalos.
5.- Los consejos no pedidos, los dan los entrometidos.
6.- El poder político es un imán que sólo atrae a la basura.
7.- No detengas el desfile para recoger diez centavos.
8.- Tiene muy pocos amigos, el que no tiene que dar.
9.- Al mal músico, hasta las uñas le estorban.
10.- Cuando el arte de engañar florece, los granujas prosperan.
11.- El delincuente que ha sido atrapado, parece más honesto que un juez.
12.- Siempre viejos pecados suscitan nuevas vergüenzas.
13.- No creas que soy mala reata, lo que tengo es mal torcida.
14.- Más ablanda el dinero, que el hablar de caballero.
15.- En tierra de calvos, los pelones son trenzudos.
16.- Quien no vela ni madruga, no cabalga en buena mula.
17.- Si el corazón fuera de acero, no lo venciera el dinero.
18.- No te calientes garnacha, que la manteca está fría.
19.- La mala fama se desparrama, y la buena a duras penas.
20.- En eso de los amores, soy como el toro palomo, no brinco pero me asomo.
21.- A los niños se les engaña con juguetes, y a los grillos con esperanzas.
22.- El error de los ilusos es no poner límites a sus esperanzas.
23.- La esperanza es un «sablazo» que los desesperados le tiran a la felicidad.
24.- Para ver bien una esperanza, hay que cerrar los ojos a todo.
25.- Bienaventurados los que no esperan nada, porque eso es lo que consiguen.