En los últimos años, si una categoría de Correcaminos se ha encargado de dar buenos resultados, esa es la de la Segunda División.
Desde la llegada de Jorge Urbina al equipo en el 2015, la oncena azulnaranja se ha convertido en un equipo protagonista, en cada semestre, el plantel ha jugado una final, hasta el momento tienen dos títulos, un subcampeonato y actualmente, además de estar en los primeros lugares de la tabla, tienen asegurado jugar la final de Ascenso a la categoría Premier contra quien resulte campeón en el presente torneo de la Liga de Nuevos Talentos.
Esta camada que ha trabajado con el victorense Urbina, más que achacarles algo, la Directiva que encabeza Rafael Flores debería acercarse a ver como trabaja, compartir conceptos y llevarlos al primer equipo que se encuentra viviendo una de sus peores épocas de la historia.
Pero no es así, increíblemente, ayer atestiguamos la práctica y vimos que a Jorge Urbina lo han hecho a un lado, así como lo hicieron en el conjunto de Ascenso en donde ya había sido presentado como entrenador por los logros deportivos que ha tenido en todas las categorías de la UAT.
Urbina permaneció a un costado de la cancha viendo como trabajan bajo las órdenes de Esteban Mejía, los jugadores que utilizará el próximo fin de semana.
Que alguien le avise a los de pantalón largo del equipo cuales son las funciones que debe hacer un Director Deportivo, cargo que ocupa Mejía, porque al parecer no se las saben.
Y si la instrucción de Rafael Flores a Mejía es aportar y mejorar, que le eche entonces la mano a Ordiales, ahí es donde sí andan por los suelos.
Fiesta pero no contigo
Parece que el descontento con Correcaminos, no es sólo de la afición, en el último partido de Correcaminos como local se tuvo la peor entrada del torneo, menos de dos mil personas asistieron al partido contra Cimarrones.
También ya se ve muy marcada la molestia que tienen los futbolistas del equipo, quienes me enteré ya ruegan a Dios y le rezan a todos los santos porque se termine el torneo para agarrar sus chivas y buscarle por otro lado.
Y es que, esto se hizo más visible en el último partido del equipo, donde después del gol que marcó Diego Olsina, el entrenador Jaime Ordiales alzó los brazos para unirse al festejo de los jugadores, pero lo dejaron como novia de rancho, vestido y alborotado, prefirieron irse hacia el centro.
Como lo dejaron “En visto”, no le quedó más a Ordiales que seguir con la mano extendida y girarla para dar indicaciones.
Por cierto, en la rueda de prensa de ese partido, Jaime alegó que su equipo juega bien, que mejoraron respecto a los torneos anteriores y lo único que le faltaba era el gol. Tal vez se le metió el espíritu de “Pepe” Treviño o se aprendió los discursos al pié de la letra.
Al rescate
Un grupo de victorenses que por tradición, herencia y convicción, son seguidores de siempre de Correcaminos, ha mostrado su preocupación por la crisis que atraviesa el equipo.
A estas personas de reconocida solvencia económica y moral, les preocupa que el equipo descienda o que por los malos resultados se decida llevárselo a otro lado.
Por esa situación, han comenzado a movilizarse y desde sus respectivas trincheras, buscarán hacer todo lo que esté en sus manos para que reaccione la Directiva y si es que sigue trabajando para el próximo torneo, mejoren su trabajo.
Ellos creen que Flores es una persona que no le tiene ni poquito amor al equipo, y si pierden la franquicia, el Presidente se irá a su casa a León como si nada hubiera pasado y peor aún, sin cumplir la promesa que vendió a los altos mandos en su llegada, que Flexi le invertiría unos pesos para hacer más llevadera la carga del equipo.
Ahora resulta
La semana pasada aquí lo dijimos, la cancha Carlos Adrián Avilés, mejor conocida como «El Rastro», durante años estuvo abandonada, quien a sus posibilidades mantuvo la actividad deportiva ahí, le dio vida al espacio y de su bolsa puso para que se mantuviera en condiciones de usarla, fue siempre don Carlos Rodríguez.
El domingo pasado, luego que roló algunos juegos en la remodelada cancha que él mismo riega, cuida y pinta junto con «Don Pepe», resulta que a la gente del Municipio de Victoria se le refrescó la memoria y se acordaron que esa cancha existe, para prohibirle que hubiera juegos ahí.
Y eso no es todo, resulta que la gente de Deportes del Ayuntamiento local, tiene toda la intención de prohibir se jueguen partidos de la liga de don Carlos en ese escenario, según que porque va a ser campo infantil y ahora sí ya salió un guapo que se le antojó poner su negocio o escuelita como quiera llamarle, ahora que ya vio a todo dar el campo.
¿Ya estará enterado el diputado federal Miguel González Salum?, ¿Qué opinarán en el Gobierno Estatal ya que la obra se realizó desde ahí?. Habrá qué ver cómo reaccionan.
Nos leemos el próximo miércoles y aguas, porque tengo ojos en todos lados.
jimmygolden02@gmail.com