CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- La ausencia de lluvias en la región del altiplano está originando problemas de sed en algunos municipios como Bustamante, Miquihuana, Palmillas y Tula, donde hay comunidades en que las personas comparten el agua de los aljibes con el ganado al sufrir la carencia del vital líquido.
Juana María Sánchez Astello, ex diputada cenecista de esa región, comentó que este es un problema ancestral el cual no se ha podido atender por parte de los gobiernos.
“Tan solo en Bustamante son poco más de 5 mil habitantes que están sufriendo por falta de agua, debido a que también las lluvias escasean y no hay de donde abastecerse”.
Destacó que en estas comunidades rurales no ha llovido y la gran mayoría de los habitantes de estos municipios tienen problemas para obtener agua, ya que las precipitaciones no fueron suficientes para recargar los manantiales.
“Ante esta situación en varias poblaciones los habitantes comparten con el ganado el agua, que almacenan en aljibes, porque no hay más”.
Refirió que las pipas para llevar agua a esos municipios son muy pocas y no dan abasto para satisfacer las necesidades de todas las comunidades rurales.
“Por lo que a nosotros compete, hacemos un gran esfuerzo para gestionar la dotación de agua a los ejidos, sin embargo solo se cuenta con pocas pipas que igual son insuficientes ya que son muchos ejidos los que se encuentran en esta difícil situación”, refirió.
Sánchez Astello dijo que por fortuna la Comisión Estatal del Agua de Tamaulipas, la Conagua y las autoridades municipales ya están trabajando para que esas comunidades rurales no sufran tanto en la época alta de estiaje en la búsqueda de pozos.
Prevén inversión para abastecimiento
La región del altiplano tamaulipeco será beneficiaria este año de una inversión por el orden de los 20 millones de pesos que busca garantizar el abastecimiento del vital líquido, mismo que presenta actualmente una grave escasez.
Los municipios de Tula, Miquihuana, Bustamante, Jaumave y Palmillas serán atendidos por la Comisión Nacional de Zonas Áridas, organismo que será el encargado de aterrizar el proyecto de infraestructura que beneficiará a esta región.
Cabe señalar que todo el territorio tamaulipeco presenta una crisis por el agua, aunque dadas las condiciones naturales de esta zona, los mantos acuíferos son insuficientes para abastecer a los pobladores. El delegado regional de CONAZA, Antonio Neira Villajuana, informó que además, en este 2017 se invertirán 70 millones de pesos, de los cuales, al menos 20 van etiquetados para la construcción de represas y centros de almacenamiento de agua en comunidades ejidales.
En coordinación con el Gobierno del Estado, se aterrizarán 55 millones de pesos más en los programas de aprovechamiento de suelo y agua, así como el Proyecto Estratégico de Zonas Áridas, éste último refiere acciones integrales en beneficio de la población como disponibilidad de agua, procesamiento de leche y reconversión de cultivos.