Exactamente ayer se cumplieron 7 años de la ‘atípica’ elección de la que se desprendió el mandato de Egidio Torre Cantú y no deben haber sido pocos los que se preguntaron en silencio cómo pudo haber sido si Rodolfo Torre, su “hermanito”, no hubiera sido ejecutado días antes de la votación.
Así es mis queridos boes, habría que recordar que en esa muy particular votación, quien obtuvo la gubernatura ni siquiera aparecía en las boletas electorales, porque tras la trágica muerte de Rodolfo, no había tiempo de mandar reimprimir las papeletas de votación y por lo tanto su nombre se quedó en ellas, aunque ya el candidato era Egidio.
Y luego entonces el día de los comicios la casilla donde el ex gobernador votó, allá por el fraccionamiento Del Valle, se convirtió en una fortaleza, decenas de guardaespaldas fuertemente armados, francotiradores y unidades blindadas.
El entonces candidato, Egidio, llegó con un chaleco antibalas bajo la camisa que vestía, no era para menos, hacía unos días, seis para ser exactos, un comando había ejecutado a su hermano y entonces había un montón de especulaciones sobre quién y por qué lo habían matado.
Como haya sido, Egidio legalmente fue electo gobernador y el resultado de su gobierno ya todos lo conocemos, ya todos lo hemos comentado.
Pero ¿cómo hubiera sido el gobierno de Rodolfo Torre, si las balas no le hubieran impedido llegar a la cita que todos dábamos por un hecho?
Lo que cada quien crea de cómo pudo haber sido un gobierno de Rodolfo es mera especulación, subjetiva y con la dosis ideológica o partidista de quien la emita.
Si, Rodolfo como Secretario de Salud se creó una imagen de ‘bonachón’, de compartido, de una persona altamente sensible, pero de lo que se hubiera tratado era de ser gobernador, de administrar todo un estado.
Por ese entonces la oficina de atención ciudadana de la Secretaría de Salud era una ventanilla de la que todos o casi todos los que llegaban a solicitar ayuda la obtenían.
Tal vez eso pueda dibujar o dar una señal de cómo habría sido Rodolfo Torre como gobernador, pero ahí en Salud hay otra forma de ver las cosas.
Y es que precisamente el carácter de Rodolfo era tan laxo que inundó a la Secretaría de aviadores que aún hoy, usted y yo seguimos pagando.
Cuando este gobierno empezó, se detectaron cientos de empleados que nunca se pararon en dos sexenios a trabajar en Salud donde puntualmente cobraban, gracias a los favores de Rodolfo con la estructura priista.
Por eso cuando comenzó este gobierno los empleados de Salud no cabían en las oficinas y a muchos de los ‘empleados’ ni los conocían en las áreas donde estaban adscritos.
¿Cuánto pudo haber aguantado Salud con un gobierno rodolfista que coleccionaba aviadores, con lo que presupuestalmente eso significa?.
Pero además habría que preguntarse si la obesidad de la nómina de Salud se replicaría en el resto de la estructura gubernamental.
¿Y cómo habría sido Tamaulipas en el aspecto de la seguridad con Rodolfo?, el pronóstico de lo que no fue, nos indica que no podría haber sido peor que con Egidio, porque era un hecho que el doctor siempre fue un tipo cercano a la gente, que escuchaba a los grupos sociales y que había hecho compromisos que seguro intentaría cumplir en ese tema, que era ya como lo es aún el tema de temas.
Su hermano Egidio no tenía ningún compromiso y al menos los primeros años era un témpano de hielo al que era difícil acceder.
¿Y qué hubiera pasado con el equipo de Rodolfo?, seguro Manuel Muñoz Cano su coordinador de campaña, hubiera sido uno de sus hombres fuertes y tal vez a medio mandato hubiera sido Alcalde de Victoria y al final hasta hubiera disputado la candidatura por la gubernatura.
Óscar Almaraz, hoy alcalde de la capital, no hubiera pasado tres años relegado en el Congreso local, porque seguro hubiera sido el líder de ese poder. Enrique Blackmore hubiese sido protagonista definitivamente y José Manuel Assad Montelongo hubiera continuado coleccionando secretarías.
Pero el hubiera no existe, a Rodolfo lo mataron y Egidio fue el beneficiario electoral de su ejecución. Ayer en Tamaulipas nadie festejó, seguro él lo hizo en privado allá en San Pedro, donde goza de la ‘dolce vita’ departiendo con otros cadáveres políticos como el de Benjamín Canales Clariond, con quien comió el fin de semana.
Garantizan abasto de medicinas…
La Secretaria de Salud, Gloria Molina Gamboa, aseguró que a un mes de iniciadas las operaciones del nuevo sistema de abasto de medicamentos en el sistema hospitalario de Tamaulipas, ya se cuenta cubierto en un 79.5 en medicamento y del 72.4 por ciento en material de curación en las unidades de todo el estado.
La meta, insistió, es que en el corto plazo quede cubierto el 100 del abastecimiento y con ello se resuelva definitivamente esa demanda.
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