MÉXICO.- Satisfacer nuestro antojo de algo dulce puede hacernos sentir mejor, pero sólo en el momento. A largo plazo, una nueva investigación ha comprobado una relación entre el consumo de azúcar y los trastornos en el estado de ánimo, como la depresión.
El estudio de la Universidad de Londres ha establecido un vínculo entre una dieta alta en azúcar y un mayor riesgo de desarrollar problemas de salud mental.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) sugiere reducir a menos de 25 gramos por día el consumo de azúcar. Pero los datos han demostrado que, a pesar de este asesoramiento oficial, la población todavía consume, en promedio, el doble de lo recomendado, lo que está causando obesidad y riesgo de enfermedades como la diabetes tipo 2.
El estudio encontró que los hombres sin un trastorno del estado de ánimo prediagnosticado, que consumió más de 67g de azúcar, tuvieron un 23% más de riesgo de sufrir de un trastorno del estado de ánimo cinco años después, en comparación con aquellos que comieron menos de 40g.
También encontraron que tanto los hombres como las mujeres que ya tenían un trastorno del estado de ánimo y un alto consumo de azúcar corrían un mayor riesgo de deprimirse nuevamente cinco años después, en comparación con los que consumían menos azúcar.
El efecto fue independiente del estado socioeconómico, la actividad física, el consumo de alcohol, el tabaquismo, otros hábitos alimenticios, grasa corporal y salud física. Estos datos apoyan varios estudios anteriores, que llegaron a la misma conclusión.
Un estudio de 2002 examinó el vínculo entre la depresión y el consumo de azúcar en seis países, y encontró que las mayores tasas de consumo de azúcar están relacionadas con mayores tasas de depresión. En 2014, un grupo estadounidense encontró que las bebidas azucaradas y artificialmente endulzadas podrían aumentar el riesgo de una persona de desarrollar depresión.
Otro estudio reciente, dado a conocer en 2015, encontró mayores posibilidades de depresión en aquellas personas con un alto consumo de azúcar refinado, pero no en aquellos con un alto consumo de azúcares naturales, como los de las frutas.
Con informacion de huffingtonpost.