CIUDAD VICTORIA, Tam.- Una de cada tres agresiones en contra de migrantes repatriados desde Estados Unidos o en tránsito hacia ese país, ocurre en Tamaulipas, asegura una encuesta realizada durante tres años a más de medio millón de migrantes (69.4 por ciento mexicanos, 13.9 guatemaltecos, 10.7 hondureños y 5.7 por ciento salvadoreños) por el Colegio de la Frontera Norte, Colef.
“Los datos obtenidos indican que de los más de 514 mil deportados durante el periodo de levantamiento de la encuesta, 28 mil 695 señalaron haber sufrido algún tipo de agresión o abuso en territorio mexicano”, señala el resultado de la encuesta.
Estas agresiones ocurridas desde 2013, suceden mayormente en estados fronterizos en el caso de los migrantes mexicanos, específicamente Tamaulipas, Sonora y Baja California y en estados del sur de México, como Chiapas, Tabasco y el Estado de México, en el caso de los migrantes centroamericanos, afirma el Colef.
Otros estudios del Colef señalan que actualmente los migrantes indocumentados dentro de Estados Unidos pelean dos grandes batallas por parte de los grupos de apoyo a migrantes a nivel federal son a favor de los Dreamers y por la reinstalación de la protección del TPS a Haití, El Salvador, Honduras.
“Asimismo continúa el trabajo por combatir las agresivas campañas de deportación de ICE a través de la protección en santuarios y de la defensa legal. A nivel estatal y local la respuesta ha sido a través de demandas en la corte para detener las acciones del ejecutivo, leyes para no cooperar con ICE en tareas de vigilancia migratoria, y acciones de apoyo a comunidades migrantes”, dicen.
“(Estas agresiones a connacionales fueron) perpetradas por organizaciones criminales y polleros ( 34 y 16 por ciento de las agresiones), policía y militares (31por ciento ) y funcionarios o autoridades de migración (nueve por ciento)”, afirma el Colef.
Pese al alto grado de vulnerabilidad en que se encuentran los migrantes en territorio mexicano, para ellos la alternativa de migrar a los Estados Unidos sigue siendo considerada como la única opción viable para mejorar la calidad de vida.
Datos de la Secretaría de Gobernación afirman que durante 2017 uno de cada cuatro connacionales de los más de 200 mil repatriados llegó a la frontera de Tamaulipas, unos 53 mil.
Más de la mitad de los repatriados fueron dejados en el Puente Nuevo Laredo II “Juárez-Lincoln”, unos 27 de los 53 mil que llegaron a Tamaulipas, y los restantes a los puentes Puerta México, Matamoros II y Reynosa-Hidalgo, Benito Juárez I y II, poco menos de 13 mil en cada caso.
Y a los centroamericanos les va peor
Amnistía Internacional (AI) denuncia que los peores tratos no son a connacionales mexicanos sino a centroamericanos y que incluso hay violencia en contra de personas centroamericanas solicitantes de asilo desde México y que incluso la suerte de estos migrantes es pero que las de los mexicanos en Estados Unidos.
“Este grave incumplimiento del gobierno mexicano puede costar la vida o poner en riesgo la seguridad de las personas devueltas al país del que huyeron”, dice AI en su informe titulado “Ignoradas y sin protección: La mortal devolución de personas centroamericanas solicitantes de asilo desde México”
Las agresiones son en un 41 por ciento extorsión, 35 por ciento sufrió robo, 14 por ciento amenazas, ocho por ciento agresiones físicas, y un tres por ciento fueron secuestrados.
“En muchos de los casos no son reportadas, por miedo a represalias, desinterés o porque se considera que hacerlo no es de ninguna utilidad”, concluye el Observatorio de Legislación y Política Migratoria.