CIUDAD VICTORIA, Tamaulipas.- Tras casi ocho años de estar casi olvidado por la inseguridad, el Centro turístico Religioso “El Chorrito”, revivió al congregar a más de 20 mil visitantes al festejar al señor San José.
Unos, aseguran que fue un milagro de la Virgen y el obispo Antonio González Sánchez lo confirma al señalar que: “la fe, mueve montañas y multitudes, por ello hoy miles de creyentes de todas las regiones vinieron hasta este Santuario”.
En entrevista realizada desafiando el sonido de tambores, cascabeles y sonajas de cuadros de danza, que dieron colorido a los festejos religiosos, el máximo Jerarca religioso de la Diócesis de Victoria, dijo que en este caso no se necesitó apoyo de la Secretaría de Turismo para conseguir que los visitantes volvieran al Chorrito.
“Ellos, no hacen nada; aquí fue la fe de la gente la que instigó para que nuevamente volvieran a este lugar que en otros años fue afectado por la inseguridad pero que hoy vuelve a ser como antes”.
Habrá dos días de peregrinar, danza y de fe
Como hace más de ocho décadas, miles de visitantes llegaron al Chorrito, para participar en los festejos del señor San José, Santo Patrono de la ex Hacienda La Mesa.
Desde el domingo por la tarde más de 5 mil personas trasladaron la imagen desde el ejido La Mesa, hasta la iglesia del Chorrito, en un recorrido de más de cinco kilómetros, con cuadros de danza y cantos.
“Desde 2010, que no veíamos tanta gente reunida en estos festejos”, atestiguó Dolores Ochoa, comerciante de la zona, quien platica que contó en un sólo día hasta 110 cuadros de danza.
“La mayoría es gente que viene de la frontera de ciudades como; Matamoros, Reynosa, Río Bravo, Valle Hermoso, pero también llegaron de Victoria, el Mante y Tampico”.
Este lunes arribaron cerca de 10 autobuses de la ciudad de Monterrey y otros de Linares, Nuevo León.
“Hacía mucho que no veía tanta gente reunida, que acamparon en los estacionamientos como lo hacían en antaño”.
Los estacionamientos se llenaron, las zonas además se usaron para colocar casas de campaña de las familias que llegaron desde el pasado sábado, estuvieron el domingo y hasta el lunes.
“Yo digo que fue un milagro de la Virgen del Chorrito, porque mucha gente de aquí le ha pedido que nos ayude a rescatar su santuario, que la gente vuelva a este lugar que es muy seguro”.
En otro tiempo fue afectado por el problema de la inseguridad, pero que hoy eso ya no existe y la muestra es que 5 mil turistas durmieron al aire libre y se quedaron los tres días de fiesta, sin que se registrara ningún incidente.
Juan Ángel Soto, quien participó en la peregrinación, dijo que el regreso de las fiestas patronales del municipio, es luz y bienestar para todas las familias que habitan en las diversas comunidades de esa localidad.
Olor a asado, pan de elote y bailes
El peregrinar de poco más de un kilómetro desde el estacionamiento donde inicia el recorrido de cuadros de danza, hasta la iglesia de la Virgen del Chorrito, hallan los visitante una mezcla de olores de comida que a lo largo de esta avenida ofrecen cientos de pequeños negocios que fueron instalados para los festejos.
El olor a asado, las gorditas, el pan de elote que es toda una tradición, las carnitas de puerco y hasta pescado frito se vendía en comercios, además de mucha artesanía y recuerdos del lugar.
En medio de la calle estaban los cuadros de danza, quienes iniciaban su peregrinar, donde se podían ver niños, jóvenes, adultos y ancianos, que sudorosos avanzaban por las calles, ofreciendo como ofrenda a la Guadalupana y al Señor San José su danza tradicional.
Entre ellos estaba Ana Cristina Enríquez, originaria de ciudad Victoria, quien ofreció su dolor físico, a cambio de un milagro concedido por la Virgen del Chorrito.
“Mi hija estaba muy enferma de bronquios en diciembre del año pasado, por eso le pedí a la Virgencita que me la sanara y como penitencia ofrecí venir en peregrinación desde el ejido La Mesa, hasta el Chorrito, para agradecerle el milagro que me concedió”.
