Caray, aunque se hagan de la boca chiquita pero la gente de la Secretaría de Salud está convertida en cómplice de esos animalitos conocidos como el zancudo y el jején pues figúrese usted que estábamos en la creencia que sólo en Llera existían pero no pues
Ciudad Victoria está hasta el tope y no hay autoridad alguna que busque la manera de exterminarlos por lo tanto preguntamos dónde están aquellas brigadas contra el paludismo que existían hace algunos meses y que lograron exterminar esta plaga por más de veinte años.
Creo que voy a tener que comprarme un pabellón y de paso instalar una tienda de esta clase de protecciones pues a lo macho con tanto piquete ya no voy a poder donar sangre a quien la necesite.
Ni modo raza no es mi culpa.
¿Pues qué pasa, sucede o acontece en Tamaulipas?
A propósito no habría forma de invitar a los dueños de propiedades urbanas para que barran y limpien de maleza sus solares y frentes de viviendas, pues de plano tengo la impresión que en vez de vivir en una ciudad vivo dentro del monte.
Ojalá la gente ponga algo de su parte para exterminar estos animalitos que no se cansan de chupar sangre.
A la plaza del pueblo de mis mayores le hacen falta dos atractivos sociales y estos son una refresquería y presentaciones artísticas de perdido los fines de semana para que la gente salga por las tardes a distraerse un rato después de las tediosas tareas del día.
¿Qué les parece tengo o no razón?
Sin duda que ante las últimas derrotas y fugas de su membresía hacia otros partidos políticos el Partido Revolucionario Institucional atraviesa por difícil situación gracias a la inoperancia de una directiva estatal que para nada ha servido pues Ernesto Guajardo Maldonado sólo ha sido y es un cero a la izquierda razón por la cual el
priismo tamaulipeco vería con muy buenos ojos su remplazo a la mayor brevedad posible pues
desde que este señor se hizo cargo de las oficinas de boulevar todo se vino para abajo al grado que se perdieron diputaciones, senadurías y de paso el Congreso y el Gobierno del Estado, prueba de lo anterior es el municipio de Llera donde los tricolores perdieron la esquina del poder, los sectores y filiales no existen en tanto que de su directiva municipal voluntariamente perdió toda presencia y contacto con la militancia pues hace meses que no convocan a una reunión y tampoco se dejan ver.
En fin diremos como antes decían los viejos “el que quiera morir por gusto que tire la primera piedra”.
Pero cual piedra si ya ni eso tienen. En fin allá los priistas y sus dizque directivos.
A propósito el resto de los partidos políticos tampoco cantan mal las rancheras pues figúrese usted que siguen de vacaciones y nada se saben de ellos. Por favor si alguien sabe de ellos díganlo pues estoy taaaan preocupado que no puedo ni dormir.
HASTA MAÑANA Y BUENA SUERTE
