El recurso de inconformidad presentado por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) ante el Tribunal Electoral de Tamaulipas (TRIELTAM), por la pérdida del financiamiento público en la entidad, es de risa loca.
Eso significa la queja interpuesta por ‘El Tucán’: Un chiste, una ocurrencia, una vacilada para soltarse la carcajada.
La decisión del Instituto Electoral de Tamaulipas (IETAM) de retirarle el financiamiento al Partido Verde, está fundamentado en la frialdad de las estadísticas: la organización que dice defender el medio ambiente, solo obtuvo el 1.56 por ciento de los votos totales en la elección por las presidencias municipales, en este año.
Es decir, el PVEM no alcanzó el porcentaje mínimo establecido por la ley electoral, para mantener el apoyo de los recursos públicos estatales: 3 por ciento.
Al sumar 25 mil 166 sufragios en las urnas, en el proceso electoral del pasado primero de julio, en la contienda por los Ayuntamientos, el Partido Verde hizo el ridículo.
Para mantener las prerrogativas oficiales estatales, a ‘Los Verdes’ tamaulipecos le faltaron otros 25 mil votos.
El desastre y la quiebra de ‘El Tucán’ en Tamaulipas, ya se veía venir. Primer grave error: dejaron en la dirigencia del partido al inútil Patricio King López, súbdito y compadre del jefe del clan ecologista Jesús González Macías, quien a su vez, se aferra con las uñas a la delegación federal de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), en el estado.
Segunda equivocación: ilusionado con una imposible alianza electoral con Acción Nacional en la entidad, establecieron distancia con su tradicional aliado, el Revolucionario Institucional.
Al asistir solos a las urnas en la contienda por las presidencias municipales de Tamaulipas, el Partido Verde exhibió sus miserias.
Con candidatos fabricados al vapor en la mayoría de los casos (dos o tres aspirantes fronterizos se salvan) y con planillas a regidores que no representaban a nadie, el PVEM mostró las debilidades que arrastra desde hace tiempo, con Patricio King López en la dirigencia.
Ante la evidente desesperación del jugoso negocio perdido, en el escenario de la nueva configuración partidista estatal, ahora el pequeño grupo de Jesús González Macías, intenta lo imposible: recuperar el financiamiento público.
La única opción que les queda a ‘Los Verdes’, de resucitar en el panorama estatal es que, en un error de cálculo político desde la Ciudad de México, Morena acepte una alianza electoral con ‘El Tucán’, en la elección del próximo año, cuando se renueve el Congreso del Estado.
EL EJEMPLO DEL EX DELEGADO DE LA SEDATU
A diferencia de muchos que se aferran a una delegación federal, a pesar de que la Cuarta Transformación ha sido más que clara de que ningún funcionario del sexenio pasado se quedará en el puesto, Sergio Vilarreal Brictson puso el mejor y digno ejemplo: renunciar.
Así de fácil y así de sencillo: Al concluir la administración federal que lo invitó a trabajar en julio del año pasado, en la delegación de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) en Tamaulipas, el tampiqueño elaboró un pormenorizado informe de los objetivos alcanzados y entregó con la frente en alto su dimisión.
Cuando Sergio Villarreal Brictson llegó a la Sedatu, afrontó un ‘problemita’: casi 90 millones de pesos del presupuesto 2016, no aterrizaron. A pesar de tocar todas las puertas, el pendiente nunca se pudo regularizar.
Por tanto, en el segundo semestre de 2017, ya en su gestión, se instrumentaron 48.3 millones de pesos en tres programas: rescate de espacios públicos, mejoramiento de vivienda y programa de apoyo a la vivienda.
Ya en 2018, las cosas cambiaron: el presupuesto manejado por la Sedatu en el estado, se incrementó a 224 millones de pesos, siendo el programa del cuarto o habitación adicional, aplicado en colonias populares, el que operó la mayor cantidad de recursos: poco más de 66 millones de pesos.
Conforme a los tiempos y a las formas, el ex delegado federal de la Sedatu solventó los procedimientos y las revisiones del Órgano de Control Interno y de la Auditoría Superior de la Federación.
Tras dejar la delegación federal, ¿cuál será el camino que tome Sergio Villarreal Brictson? Muy posiblemente lo sabremos al inicio del próximo año.
LOS VALIENTES PARA EL PRI DE TAMPICO
Buenos comentarios surgieron a raíz de la posibilidad de que el empresario Arturo Núñez Ruiz, propietario de la cadena de pastelerías ‘Suspiros’, tome las riendas del PRI en Tampico.
Y ojo: hay otro aspirante a dirigir el comité del priismo jaibo. Ya levantó la mano. Quiere entrarle. Su nombre y apellidos: Eustacio Reyes Hernández.
¿Quién es él? Es un académico. Es Maestro y Doctor en Derecho Penal y Maestro en Juicios Orales, con estudios en Granada, España. Fue presidente de la Barra de Abogados en la zona.
Un empresario y un académico… nada mal para un PRI que hasta hace unos días, parecía estar ‘frito’ en tierras jaibas