En el PAN de Tamaulipas, Morena dejó de preocupar el mismo día que los militantes y sus dirigentes se pelearon. Exacto, el día que Alejandro Rojas y Yeidckol Polevnsky llevaron al terreno de las redes sociales, sus diferencias.
También, el día que los morenistas salieron a las calles a ventilar sus pleitos, y hacer largas filas para registrar sus candidaturas, “ese día, nos dejaron de preocupar, admite un alto funcionario que reconoce, que hasta antes de esos pleitos, “Morena, sí nos quitaba el sueño; pero ya no”.
En el gobierno estatal, y en el partido, ya tienen todo un plan para seguir siendo mayoría en el Congreso, luego del mes de junio.
“Ganando 12 diputaciones de mayoría, estamos del otro lado. La mayoría simple la alcanzamos con las pluris y los partidos satélites, incluyendo el PRI que se ha convertido en un aliado natural nuestro”, dicen los operadores del PAN.
En los números que trae Acción Nacional, en Nuevo Laredo, solo un distrito de los tres, está en riesgo de perderse, pero se puede ganar. En Reynosa, la máxima figura de Morena que era José Ramón Gómez Leal, está desinflado y disminuido, incluso dan a entender que el flamante “superdelegado” ya dobló las manos y no representa ya un riesgo para el panismo.
Sin embargo, sí les preocupa la actitud y la conducta que vaya asumir en las elecciones la alcaldesa Maki Ortiz, de quienes dicen trabajaría para Morena. Aunque aseguran que todavía hay tiempo para convencerla de que juegue para la causa azul; el trabajo de convencimiento que haga el gobernador será determinante para que Maki no se vaya con la contra.
La alcaldesa de Reynosa está resentida con el partido porque no lograron meter a su hijo como candidato a diputado.
Reynosa es fundamental porque son cuatro diputaciones.
En Matamoros, de los tres distritos, Morena se puede llevar 1 o 2.
En Victoria, Arturo Soto, dicen, tiene muy planchado el distrito y si llegara a complicase sería por errores del mismo candidato aunque ahí tiene todo para ganar. En el Distrito Victoria norte, las encuestas favorecen a Alejandro Ettiene, pero Pilar Gómez, puede todavía dar el estirón. El hecho de ser del primer círculo del poder, le da el plus para que todos operan para su causa.
Los Distritos de la región cañera, César Verástegui y su grupo los tienen plenamente dominados y confían en ganarlos, pero la presencia de Javier Villarreal les mete mucho ruido, porque el ex alcalde mantense, a pesar de lo que digan, es el único con la bandera de Morena que puede darle la pelea.
En el sur los distritos que le tocan a Chucho Nader, no están fáciles. Ahí el PAN sí anda preocupado. Y en Madero, Morena, es en la única zona donde puede ganar a plenitud, pero con el Joaco, se equilibran las fuerzas.
El escenario para el PAN, pinta bien, sin embargo hay dos cosas que le preocupan de sobremanera:
El gobierno no va a meterle dinero a las campañas. A los candidatos azules ya se les dijo que todo el costo de la campaña lo van a tener que solventar ellos; de parte del gobierno no habrá ni un centavo para ellos.
Por el lado Morena y la Federación, también no le van a meter dinero a los candidatos, pero lo que más preocupa al PAN es que el gobierno federal va a dejarse caer con todo para fiscalizar el proceso electoral. Si atrapan a algún funcionario cometiendo algún delito electoral lo van exhibir y lo van hacer “perro del mal”; a eso es a lo que le temen, a que los Morenos judicialicen el proceso y se lo lleve a los tribunales. Ese es el verdadero temor en el búnker azul.
En el PAN creen que van a ganar, porque Morena no va con los candidatos idóneos, pero sí están conscientes de que la judicialización es la mejor arma para pelear el Congreso.