TAMPICO, TAMAULIPAS.- Un promedio de 112 presas que abastecen los ejidos, comunidades, rancherías y predios agrícolas están secas.
Toribio Cruz González, dirigente de la Unión de Campesinos, informó que en la extensa zona rural se contabilizan entre 220 a 232 embalses y represas para uso agrícola, doméstico y para el ganado.
“Las condiciones son críticas en la región campesina. Las presas están secas y se compromete la actividad económica del campo”, dijo.
De acuerdo con Guillermo Aréchiga, director de la oficina de Desarrollo Rural y Ganadería, no se tienen precipitaciones pluviales en la cantidad y las condiciones desde el verano del 2017.
En consecuencia, se dejaron de sembrar 30 mil hectáreas de sorgo en los dos ciclos correspondientes, con pérdidas de más de 700 millones de pesos para el sector productivo.
Las condiciones adversas que enfrenta el sector rural en Altamira por la sequía mantiene en proceso de evaluación la posibilidad de emitir una declaratoria de emergencia, dijo Gonzalo Alemán Migliolo, secretario de Desarrollo Económico, Ganadería y Pesca en Altamira.
El funcionario, informó que los embalses y represas en la zona rural se encuentran seriamente afectadas por la falta de lluvia.
“Nosotros levantamos un censo de las presas que hay en el municipio. Les puedo decir que un 54 por ciento de las presas están secas”, dijo.
Serapio García, Síndico Primero del Ayuntamiento, sostuvo al inicio de la semana que ya se habrían enviado un millón 200 mil litros de agua, hasta el pasado fin de semana a 10 comunidades de la región rural afectadas por el abasto de agua.