Me resisto a creer que la severa crisis de suministro de agua potable en Victoria sea producto de un sabotaje, como ha comenzado a especularse, mientras miles batallan por llevar líquido para lo más indispensable en la capital; sería un crimen imperdonable.
Así es mis queridos boes, el tema del agua en Victoria, la Perla Tamaulipeca, no es nuevo, viene arrastrándose desde hace ya varios lustros, pero si creo que esta crisis es la peor, porque ocurre en el peor momento.
Este año, hemos tenido en Victoria y en general en el noreste del país, semanas enteras con temperaturas de hasta 46 grados y sensaciones térmicas que rondan los 50. A esas temperaturas un día sin agua es una tragedia para cualquier familia, tres, cuatro o cinco días es la locura.
Ese tal vez es uno de los factores que más ha agravado, en la percepción, la crisis por la que atravesamos los de Victoria.
Sumémosle obviamente los desperfectos de las instalaciones de la Comapa, un día truenan dos bombas, otro una pluma, otro alguien ocasiona una mega fuga, el caso es que en los últimos días siempre ha ocurrido algo con la infraestructura del organismo operador.
Y de ahí surgen las suspicacias ¿alguien o algunos, un grupo, un enemigo político está saboteando las instalaciones de Comapa como para afectar la imagen de alguien?.
Seamos claros, Comapa Victoria es dirigida por Humberto Calderón, cuñado de Arturo Soto, ambos panistas, este último es diputado local electo y hasta hace unas semanas era subsecretario de Ingresos del Gobierno estatal.
Para el análisis de comederos políticos, la de Humberto Calderón es una posición política ganada por Soto, a quien se atribuye y con harta razón el manejo casi total de la estructura azul en Victoria.
Por ahí parece que no hay discusión, aunque también habría que reconocer que el gerente de Comapa (es decir el cuñado) tiene méritos suficientes para ser el titular del organismo, por su carrera de Ingeniero Hidráulico, con una propuesta de doctorado, experiencia en el campo.
Calderón no es político, al menos no hasta ahora, por lo que la teoría de sabotaje con fines de daño político tendrían que ser enfocadas a Soto, su cuñado y al que en teoría le debe la chamba en la Comapa.
¿Pegarle a Arturo Soto, dejando sin agua a miles de victorenses por tantos días suela lógico?, nombre, suena a una teoría de los sin quehacer.
¿Para qué pegarle a Arturo Soto ahorita?, ni modo que lo vayan a tumbar ¿de dónde?, si ya ganó la elección de principios de junio. En todo caso el sabotaje tendría que haber sido la semana de la elección, como mínimo.
Suponer que le están pegando a Soto para bajarle los humos rumbo a las elecciones que vienen, también se me hace un despropósito, porque falta tanto, porque para el 2021 no hay nada definido y para el 2022 mucho menos. Sería gastar pólvora antes de tiempo; incluso victimizarlo.
Qué a Soto le ven, en la boleta del 2021, desde luego, yo lo veo ahí otra vez compitiendo, pero no podemos decir que por la alcaldía o por una diputación federal, insisto falta harto.
¿Qué le ven como un obstáculo muy difícil de superar quienes piensan en la reelección de la autorizad de la capital?, pues debe ser, pero no son los tiempos.
Y aquí va el otro pero, para los que hacen conjeturas de esas que queriendo ser maquiavélicas terminan siendo absurdas, sería una estupidez que desde el mando municipal se le quiera sabotear a Soto con la Comapa, porque lo que le pega a uno en este tema le pega al otro.
Veamos las redes, chequemos a los malquerientes de la Comapa, son los mismos que hoy se lanzan contra el titular de la alcaldía; por ahí no va señores.
En resumen, no creo que haya alguien tan malo, tan inhumano, tan mugroso como para pensar en castigar al pueblo de Victoria para que éste se enoje con Soto y con el Alcalde o solo con uno de ellos.
Si creo por ejemplo que Humberto Calderón tiene muy mala suerte, porque cuando no le llueve le llovizna, si creo por ejemplo que la crisis del agua llega cuando el mando municipal no tiene la mejor relación con los comunicadores y el mejor manejo en redes.
Creo por lo tanto que la conjugación de pésimas instalaciones, olvidadas por años, la mala suerte del cuñado, la débil relación con los medios y los intensos calorones han llegado al mismo tiempo.
Entiendo que las redes sociales estén encendidas, que pidan renuncias, que exijan juicios políticos, que llamen a demandas colectivas, eso nadie lo puede parar, el enojo es comprensible, porque a nadie le gusta apestar a sudor, a nadie le gusta ir a un sanitario sin agua, a nadie le gusta bañarse a jicarazos.
También entiendo y los involucrados deben entenderlo igual, que si bien no hay dolo o negligencia en la crisis que atraviesan, el daño político si el problema se alarga será tan real, como que de muchos grifos hoy, ayer y antier no salía agua y de la boca de los afectados salían chorros de mentadas. Comentarios: meliton-garcia@hotmail.com Twitter: @melitong