Atrás quedaron los tiempos en que, como si fuera un tumulto, una vez emitida ‘la línea’, los sectores y organizaciones del Revolucionario Institucional (PRI) cerraban filas en torno a un candidato o un dirigente del partido.
Sin embargo, el patrón de conducta priista no ha cambiado en su esencia: ya no es una multitud la que cobija las aspiraciones de ‘el bueno’, del que ‘trae la bendición’, pero se mantiene la tendencia establecida por ‘la cargada’: la adhesión instantánea y en masa a favor del ‘elegido’.
Bueno, en realidad ya no es ‘la cargada’ de antaño, en la actualidad, con los pocos priistas que quedan en el partido que alguna vez fue calificado de ‘invencible’ se puede decir que se trata de una ‘mini-cargada’.
Se trata de la misma adhesión al instante, pero la cantidad de militantes se ha desinflado ante la impresionante fuga de priistas hacia otros partidos (PAN o Morena), algo que ocurre en Tamaulipas desde que el PRI perdió la gubernatura en junio de 2016.
Esa añeja costumbre priista, ‘la cargada’, ahora en su versión ‘mini’, se observará el próximo jueves, cuando Alejandro Moreno Cárdenas, mejor conocido como ‘Alito’ visite Tampico y Ciudad Victoria como parte de su campaña para llegar a la presidencia nacional del tricolor.
En realidad el gobernador de Campeche con licencia llegará a Tampico el miércoles, en el vuelo nocturno de Aeroméxico, procedente de la Ciudad de México.
El campechano llegará acompañado de Carolina Viggiano Austria, su compañera de fórmula y candidata a la secretaría general del comité nacional del PRI. Ella es esposa del ex gobernador de Coahuila, Rubén Moreira, cargo que heredó de su controvertido hermano Humberto Moreira.
Al día siguiente, el jueves 18 de julio, ‘Alito’ se levantará muy temprano para ir a correr a la Laguna del Carpintero.
Se supone, de acuerdo a su agenda, ahí llegará a las 7 de la mañana. Los poquitos priistas tampiqueños le deben sugerir que tenga cuidado con los cocodrilos que merodean a la orilla de la laguna, ya que de repente pueden soltarle una ‘mordida’.
‘Alito’ correrá o trotará aproximadamente una hora. Después desayunará de ‘rapidito’ en un domicilio de la colonia Los Pinos para luego trasladarse al Hotel Posada de Tampico donde se reunirá con directivos de los medios de comunicación de la zona sur del estado.
A las 10:15 horas, Alejandro Moreno y Carolina Viggiano sostendrán una reunión con la militancia priista de los municipios del sur tamauiipeco: Tampico, Madero, Altamira, Aldama y González.
Será interesante ver cuántos priistas integrarán ‘la mini-cargada’ a favor del proyecto de ‘Alito’. La militancia tricolor se ha visto seriamente mermada desde que el PAN ganó la gubernatura del estado.
Además, la situación empeoró para el priismo de la entidad con el triunfo en las urnas de Andrés Manuel López Obrador y su Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) el año pasado, victoria con la que llegó la 4T a la presidencia de la república.
Por instinto de sobrevivencia política y económica, muchos priistas prefirieron sumarse a las estructuras de Acción Nacional o de la Cuarta Transformación y trataron de adaptarse a los cambios.
La fuga inició en 2016 y se intensificó en 2018 con la pérdida de municipios estratégicos: Tampico, Ciudad Victoria, Matamoros y Río Bravo.
Eso no fue lo peor: el pasado 2 de junio, el PRI no pudo ganar ni una diputación local y se quedó en un distante tercer lugar con solo el 10 por ciento de la votación total. Estuvo a punto de convertirse en un partido de un solo dígito, cual integrante de ‘La Chiquillada’.
Ese es el PRI que visitarán Alejandro Moreno y Carolina Viggiano, un priismo tamaulipeco reducido a escombros tras las últimas tres batallas electorales.