No de manera oficial, pero en los hechos MORENA en Tamaulipas ha descartado la posibilidad de pelear por la gubernatura que dejará vacante en el tercer tercio del 2022 Francisco Javier García Cabeza de Vaca, allanando el camino para que los azules repitan en el poder estatal.
Así es mis queridos boes, las figuras estatales de la mal llamada Cuarta Transformación han dejado, en la mayoría de los casos, pasar casi un año, el mejor año, para hacer la estructura que los ponga en la pelea contra los panistas.
Me explico: todos los ‘figurones’ estatales de MORENA ganaron por la inercia del triunfo arrollador de Andrés Manuel López Obrador, ninguno o casi ninguno de ellos podría haber ganado solo el puesto que tiene; aunque algunos floten elevados por la soberbia y la vanidad que les da el cargo que AMLO les regalo gracias a su arrastre en el 2018.
Si no ganaron por méritos propios, sino trepados en la ola pejista, los morenistas que sueñan con la gubernatura tendrían que haber aprovechado el primer año de la toma del poder, en el que el presidente traía la popularidad por los cuernos de la luna; máximos históricos.
Hubo mediciones que en diciembre le daban a AMLO hasta el 90 por ciento, las más conservadoras más del 70 por ciento.
Para entonces, los senadores morenos tenían tres meses en el mandato, porque entraron en septiembre y los alcaldes dos meses después.
También para diciembre, el súper delegado de la 4T ya había recorrido una o dos veces el Estado en reuniones con empresarios, alcaldes, líderes de ONGs, medios de comunicación y todo grupo mayor a dos integrantes.
Sin embargo, la euforia de José Ramón Gómez Leal, el súper delegado y de Américo Villarreal Anaya, el senador que aspira, suspira, sueña y se mira en la gubernatura, muy pronto se convirtió en ausencia, de ambos.
Pero igual paso con los alcaldes y sobre todo con los diputados federales, que aunque no han alzado la mano por la candidatura a la gubernatura, si tienen proyectos personales que igual pueden estar por ahora en ‘Stand by’.
Bueno pues igual ocurrió con los tamaulipecos más encumbrados (aquí es donde me gana la risa) en el gabinete de la 4T; me refiero a Héctor Martín Garza El Guasón (el apodo le queda como anillo al dedo) y Rodolfo González Valderrama, director de RTC.
Cada uno por separado, pero usando el mismo canal de dispersión (supongo que para ahorrar) se decían y lo siguen diciendo al que les escuche que son el más cercano, el más querido, el más escuchado de AMLO.
Bueno pues estos dos también brillan por su ausencia rumbo al 2022, porque como Américo y JR, pensaron que el tsunami electoral apodado El Peje seguiría arrasando en Tamaulipas y que con la estafeta de MORENA bastaría para que el pueblo bueno de tierras cuerudas cayera rendido a sus pies.
Nada de eso ocurrió, JR se desinfló apenas comenzó oficialmente la 4T, porque ni para gestionar una audiencia con algún secretario de estado sirvió, mucho menos para resolver problemas particulares de los grupos económicos o de poder con los que se comprometió y comprometió al macuspano. Hoy apesta ante los empresarios a los que embarcó y luego no les regresó el favor.
Con Américo pasó lo mismo, si en campaña fue un pobre candidato que no reunía a más de 20 simpatizantes por sí solo, pero tuvo la suerte de que AMLO lo arrastró al escaño, hoy mucho menos, porque sus representados han sido afectados por la 4T y él no ha movido un dedo a su favor.
¿Cómo irían Américo y JR a buscar el voto ante los miles y miles de productores agropecuarios de Tamaulipas a los que AMLO y compañía (ellos son de la compañía) han dejado al borde de la quiebra por la cancelación de apoyos?
¿Cómo irían JR y Américo en busca del voto popular, si hay miles de madres trabajadoras a las que una decisión de la 4T las dejó sin estancias infantiles para sus niños y ninguno de los dos dijo a su favor, esta boca es mía?
¿Cómo irían JR y Américo en busca del voto de la clase media o media alta, si todos tenemos un amigo o un familiar que fue corrido de su puesto en el gobierno federal y amenazado por la 4T y hoy sobrevive de limosna y estos tampoco hicieron nada?.
Y fue, ya decía el mejor año del gobierno pejista, porque el 2020 pinta más negro que el presente que aún le queda algo del súper bono democrático con que llegó, luego del 2021, quien sabe qué infierno estaremos sufriendo.
Del Guasón y González Valderrama hay poco que decir, por el lado del Oficial mayor de la SEP, anda orondo porque apadrino a miles y miles de muchachos de los CBTIS en el Estado ahora en sus graduaciones, pero no le alcanza para entender que sus aburridos discursos standups sin gracia, lejos de generarle simpatías le acarrearon mentadas de quienes tuvieron que soportarlos para poder recibir sus certificados.
Más discreto González Valderrama, apenas le ha alcanzado para una que otra aparición en eventitos nada concurridos. Estos dos, no llegarán a la recta final, a menos que decidan mejor ir por alguna alcaldía y hasta ahí tengo mis dudas.
Como lo he dicho antes, MORENA echó a la basura la luna de miel del primer año y ha dejado al PAN la vía libre para repetir en el poder en Tamaulipas. Comentarios: meliton-garcia@hotmail.com Twitter: @melitong