TAMPICO, TAMAULIPAS.- La alta vulnerabilidad de la zona conurbada rodeada de agua, hace latente el riesgo que corren 60 mil personas ante el rompimiento del cordón litoral en Altamira con la llegada de un huracán, o marea de tormenta.
La alerta de la erosión del cordón litoral se dio en 2011, hace 8 años, sin que hasta el momento se haya hecho algo para evitar que continúe, a la fecha se han perdido 380 metros de litoral costero y cada año se pierden 11 metros de playa.
En esas fechas se gestionaron recursos ante Hacienda por 600 millones de pesos con ayuda de Movimiento Ciudadano y el entonces diputado Francisco Rábago, sin embargo la API Altamira no entregó los estudios a tiempo que hizo el Instituto Mexicano del Transporte, y se perdieron esos recursos. Ahora nuevamente se les ha etiquetado dinero para este proyecto en el presupuesto 2020.
“Más de 60 mil pobladores de ciudad Madero están en riesgo con un daño patrimonial de 1,500 millones de pesos, el cordón litoral es una línea, la primer barrera de protección natural contra los eventos de huracanes o tormentas, que se destruyen cuando hay un huracán pero se vuelven a hacer, sin embargo el desarrollo portuario y urbano ha generado los efectos de erosión”, advirtió el Dr. Sergio Jimenez Hernández, director del Centro de Investigación y Desarrollo en Ingeniería Portuaria , Marítima y Costera de la UAT.
Pidió a las autoridades del puerto de Altamira que tomen en cuenta el riesgo que se corre, no solo para la población sino para la infraestructura portuaria.
“La infraestructura que está en la costa es la que va a enfrentar los embates del oleaje y marea de tormenta, la principal Barrera que nos va a proteger en su momento cuando esto pase va a ser las vías de ferrocarril que comunican al puerto de Altamira y al corredor urbano, eso significa que es donde va a ir a chocar el oleaje cuando entré, pero ni las vías del ferrocarril y el corredor urbano fueron diseñados para eso, no tienen fortaleza van a contener en un momento el agua pero cuando lo socave llegar a abordar toda la zona poblacional”.
Jiménez Hernández, advirtió que hasta el momento la API ha realizado el camino de acceso para construir las obras de protección, les han etiquetado recursos por 271 millones de pesos para el 2020.
“Sugiero es que se siente a la mesa el director del puerto de Altamira, en ellos está la solución, son los que tienen que corregir el problema, la administración portuaria de Altamira tiene ya el proyecto y el conocimiento del problema”.
Apuntó que ” En breve se va a perder el cordón litoral y habrá una bahía, con eso el mar no los va a acercar a la zona de lagunas conejo, todo eso se va a perder al aumentado el nivel del mar”.
Actualmente el deterioro del cordón litoral hace que haya una diferencia de altura entre el mar y la marisma de 20 cm, lo único que nos protege es un cordón litoral de 20 cm, afirmó.
“Si nos llega un huracán como Hilda, Gilberto o el Catrina que generó una sobreelevación del mar de 7 metros, no estamos exentos la marea de tormenta va a chocar con esta zona alta y derramar todas sus aguas a la parte sur de Altamira y el norte de Madero”.