CIUDAD VICTORIA, TAMAULIPAS.-La escasa vigilancia y la inclemente competencia por conseguir producto, ha ocasionado que se incrementen las incursiones de pescadores furtivos desde Tamaulipas hacia Estados Unidos.
Recientemente, autoridades de Estados Unidos reportaron por tercera ocasión la detección de embarcaciones mexicanas que realizan actividades ilegales de pesca en aguas estadounidenses del Golfo de México.
Diversas organizaciones han documentado, que estos pescadores zarpan de Matamoros y cruzan la línea territorial de los Estados Unidos.
En su informe la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) advierte que a pesar de las sanciones que se han impuesto, la pesca furtiva de mexicanos en aguas estadounidenses no cesa.
Esto ocurre, a pesar de que el Departamento de Comercio de Estados Unidos otorgó una certificación positiva a pesquerías de México para este 2019, en su informe .
El número de enjuiciamientos y multas impuestas a pescadores que han sido capturados ha ido en aumento, pero esto no ha limitado la pesca furtiva.
Incluso, expone, hay reincidencia en la incursión de pescadores ya que algunos han sido interceptados más de 20 veces por las autoridades estadounidenses.
“Los resultados de la Fiscalía compartidos por México muestra que ciertos ciudadanos mexicanos están acumulando numerosas multas por pescar repetidamente en aguas estadounidenses”, expone NOAA en el informe bienal enviado al Congreso de EU.
“A pesar del creciente número de enjuiciamientos por parte de México y la imposición de multas a los ciudadanos mexicanos declarados culpables de pescar en aguas estadounidenses, a Estados Unidos le preocupa que estas acciones aún no hayan tenido un efecto material en el número de incursiones”.
De acuerdo con el documento Informe de Mejoramiento de la Gestión de la Pesca Internacional, en 2015 y 2017 se detectaron embarcaciones que participaron en actividades de pesca ilegal, no declarada y no regulada (INDNR).
En 2016, la Guardia Costera de Estados Unidos capturó 35 embarcaciones mexicanas por pescar ilegalmente en su territorio; en 2017 detuvo a 33 embarcaciones ilegales. Sin embargo, en 2018 abrió 51 expedientes de este tipo.
Según el reporte, los pescadores mexicanos navegan en aguas estadounidenses a bordo de lanchas y emplean el palangre como arte de pesca para capturar predominantemente pargo rojo o huachinango.
La Guardia Costera de Estados Unidos reportó que ha detenido a un gran número de ciudadanos mexicanos que son delincuentes reincidentes, algunos de los cuales han sido interceptados más de 20 veces desde 2014.
En tanto, advierte que las lanchas que emplean los pescadores ilegales tienen efectos nocivos sobre las poblaciones de peces, incluido el pargo rojo, así como la captura incidental de tortugas marinas protegidas.
“La NOAA, el Servicio de Parques Nacionales y el Departamento de Parques y Vida Silvestre de Texas han reportado importantes varamientos de tortugas en las playas de Texas, probablemente resultado de la captura incidental de embarcaciones mexicanas que pescan ilegalmente en aguas estadounidenses”, indica.
Además, anticipa que Estados Unidos puede estar comprando pescado obtenido ilegalmente en aguas estadounidenses ya que, en 2018, importó 4 millón 796 mil 693 kilos de pargo fresco y congelado con un valor declarado de 33 millones 36 mil 108 dólares.
“Genera preocupación de que estas importaciones puedan incluir pescado cosechado ilegalmente en aguas estadounidenses. Según las consultas con México sobre este tema, parece que si bien el control y el cumplimiento por parte de la flota con licencia puede haber mejorado, sigue habiendo una flota sin licencia que opera sin un monitoreo o control significativo por parte de México”, afirma.
La NOAA y el Departamento de Comercio anuncian que en el próximo informe bienal 2021 buscarán que exista mayor monitoreo y control de manchas por parte de México.
La pesca furtiva tiene su base de operaciones en Playa Bagdad, Matamoros, donde la frontera con Estados Unidos empieza.
Desde hace años, por lo menos desde 2015, pero seguramente mucho antes, pescadores ribereños de México salen de este puerto tamaulipeco y entran a aguas norteamericanas a pescar, principalmente huachinango y tiburón.
Las autoridades federales de Estados Unidos y estatales de Texas intentan detenerlos, pero los pescadores a menudo los ven venir y logran regresar al lado Mexicano de la frontera a tiempo.
Las pangas mexicanas no siempre logran escapar. En 2016, la Guardia Costera de Estados Unidos capturó 35 embarcaciones pescando ilegalmente de su lado. En 2017, fueron 33. En 2018 la Guardia Costera abrió 51 expedientes con este tipo de casos.
Estas incursiones son noticia cotidiana en Texas, donde la pesquería del huachinango es una de las más importantes. Lo que más irrita a las autoridades estadounidenses es el grado de reincidencia. La misma Guardia Costera ha reportado que existen individuos que han sido detenidos más de 20 veces desde 2014. Los detienen, los regresan, consiguen otra panga y regresan
Y viene recorte a vigilancia
El Gobierno federal prevé para 2020 un recorte presupuestal de 35 por ciento para la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (Conapesca) que repercutirá directamente en sus tareas de inspección y vigilancia contra la pesca ilegal.
Un análisis del presupuesto de la Conapesca realizado por la Consultoría Humint, que considera los datos preliminares del proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2020, advierte que el presupuesto de la dependencia pasará de mil 875 millones 379 mil 941 en 2019, a mil 223 millones 752 mil 876 pesos, es decir 651 millones 627 mil 65 pesos menos.
Según el diagnóstico, la reducción al gasto de Conapesca se resentirá directamente en las tareas de regulación, supervisión y aplicación de las políticas públicas en materia agropecuaria, acuícola y pesquera; un rubro en el que el gasto pasará de 460 mil 876 millones 459 mil en 2019, a 401 mil 952 millones 891 pesos el próximo año.
Además, el presupuesto dirigido a los programas de productividad pesquera y acuícola resentirán también una caída cercana al 50 por ciento al pasar de mil 158 millones 998 mil 352 en 2019 a un gasto de 564 millones 940 mil 464 pesos en 2020.
“El Gobierno de México puede reformar el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2020 para regresarle algo a la Conapesca y poner a trabajar a la gente que lleva a cabo las labores de vigilancia e inspección de la Conapesca porque hoy tienen serias limitantes para hacer su trabajo, gasolina, viáticos para estar donde tienen que llevar cabo su actividad”, planteó al respecto Pedro Zapata, director de Oceana México.
De aprobarse la propuesta de presupuesto para Conapesca, anticipó, el sector pesquero empeorará.
“Hasta ahora, el cambio parece ser para empeorar en el sector pesquero”, sostuvo el especialista.
“No hay actividades dentro del sector ni políticas anunciadas o cambios radicales que apunten a razones para pensar que el cambio de Administración en el tema pesquero, ha sido positivo. Tenemos que darle a la pesca el lugar que merece porque lo que está pasando es que el Gobierno no le importa este sector que le da empleo a 300 mil personas y alimentos de alta calidad y nutrición a un país del tamaño de México”.