Con el correr de los días nos iremos enterando de qué ocurrió entre el viernes y este martes para que se viniera abajo el acuerdo que habían firmado los participantes de la mesa de trabajo entre los representantes de la GOAN y los funcionarios federales del Sector Salud.
El documento, que fue hecho público ayer en la cuenta de twitter de la Asociación de Gobernadores de Acción Nacional, señala cuatro puntos de coincidencia: 1.- Mantener la propiedad y manejo de infraestructura estatal; 2.- dejar abierta la Posibilidad de comprar medicamentos con precios referenciados; 3.- tener acceso a todos los fondos federales de Salud, y 4.- integrar un modelo de salud nacional.
Al calce aparecen las firmas del gobernador de Aguascalientes, y presidente de la GOAN, Martín Orozco; el director general del INSABI, Juan Antonio Ferrer Aguilar; el Subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell Ramírez; la Secretaria de Salud de Tamaulipas, Gloria Molina; y el diputado del PAN, Ector Ramírez Barba.
Por eso, el viernes se habló de un acuerdo firme para que los gobiernos de Acción Nacional se suscribieran, bajo sus propias condiciones, a un nuevo modelo público de Salud.
Pero ayer todo cambió. La reunión con el presidente López Obrador que era para ratificar lo pactado cuatro días antes, derivó en un radical cambio de planes. Ni convenio, ni acuerdo, ni firma de ningún tipo. Según la versión de los gobernadores, las opciones planteadas por el gobierno federal se redujeron a adhesión sí o adhesión no, sin matices posibles.
La GOAN ya dio vía libre a los gobiernos panistas para tomar la decisión que mejor les convenga a sus entidades. Veremos lo que ocurra en Tamaulipas, pero a estas alturas se ve lejana una adhesión a rajatabla como la que pretende el gobierno Federal.