Ana Karen y Celso fueron una de las 18 parejas que el pasado 14 de febrero, día del amor, decidieron contraer matrimonio en Tampico bajo un amparo que fue tramitado en el mes de septiembre del 2019 y que la autoridad federal resolvió en menos de un mes.
Pero este matrimonio civil fue significativo ya que se trató de la primera boda pública de una mujer transgénero, de las 5 uniones que se han realizado en Tamaulipas de un total de 29 matrimonios igualitarios que mediante amparo se han llevado a cabo, ya que en el estado sigue prohibido el matrimonio entre personas del mismo sexo.
Fue a las 12 del día que llegaron a las instalaciones de la Primera Oficialía del Registro Civil en Tampico donde Ana Karen, mujer transgénero llegó vestida con un traje istmeño a esta ceremonia civil el cual constaba de una huipil café de flores bordadas a mano en color amarillo y dorado y una falda larga amplia de color blanco.
El cabello lo recogió en dos dos trenzas y se colocó un tocado de flores y de accesorio un medallón grande de bisutería fina
“Es una fecha clave, porque todos los ojos están puestos en una boda colectiva y nuestra boda no lo es; es la primera boda transgénero que se hace pública de un total de 5 que se han realizado en Tamaulipas” dijo Celso Pérez Ruiz.
Agregó, “la decisión que tomamos se basa principalmente en nuestro derecho para darle validez legal a un proyecto de vida (…)estamos en un estado ultraconservador porque Tamaulipas está muy lejano que se pueda manejar los temas de matrimonio igualitario y de ley de identidad del género” .
Por su parte Ana Karen López Quintana refirió que es una larga lucha para que se les reconozcan sus derechos a pesar de las trabas que existen.
“Que lo nuestro sea como un ejemplo para otras personas de la comunidad LGTBI y que lo hagamos en este caso con un amparo pero es un derecho que tenemos las personas” refirió.
Correspondió a la titular de la Primera Oficialía del Registro Civil de Tampico Esperanza Serratos Bolado realizar este matrimonio civil dando acato a un ordenamiento de un juzgado federal.
“Si un día su amor se pone a prueba, no duden en defenderlo, porque es mejor luchar por la persona amada que permanecer en una cómoda y triste soledad porque llegar al final de nuestras vidas sin haber amado y sin haber luchado por la persona que uno quiere es como si no se hubiera vivido” les dijo a los contrayentes antes de declararlos unidos en perfecto y disoluble matrimonio civil.
RECIBIERON BENDICIÓN DE PASTORES
Por la noche de ese día Ana Karen y Celso recibieron en un salón de eventos la bendición de los integrantes de la Comunidad Metropolitana que es una congregación de Estados Unidos que apoya a la comunidad LGTBI siguiendo un protocolo religioso.
“Ella y él han tenido que defender de manera constante su amor de estigmas de la discriminación y lo han hecho con esperanza, optimismo y resiliencia” le dijo.
Tras ello se procedió por parte de los padrinos a entregarles las argollas de matrimonio que simbolizan la eternidad, después las arras y el lazo, tal y como se realiza en una ceremonia religiosa.
Los novios bailaron el tradicional vals siguiendo la temática istmeña donde Ana Karen lució el traje de boda de las mujeres tehuanas con joyas de gran tamaño.
Acompañaron a los novios sus padres, familiares y amigos cercanos que celebraron con ellos su felicidad de unirse en matrimonio.
