PÀNUCO, VERACRUZ.- La falta de infraestructura de salud en las zonas rurales, sigue siendo tema pendiente qué afecta gravemente a la población de estos sectores.
El agente municipal de la comunidad Barco y Periquillo, José Alfredo Castillo Valero, dijo que es urgente la construcción de un dispensario médico en ese lugar.
Manifestó que los más de 600 pobladores cuando quieren recibir la atención médica, tienen que trasladarse a la comunidad más cercana como es Vega de Otates.
Sin embargo cuando llegan a Vega de Otates se encuentran con que no hay una adecuada atención médica por lo que tienen que trasladarse hasta la cabecera municipal,los cuales representan fuerte gasto económico y de tiempo.
Refirió que incluso en ocasiones tienen que viajar hasta el vecino municipio de Tampico en Tamaulipas amén de que los atiendan adecuadamente.
Manifestó que no se puede mantenerse en esta situación de vulnerabilidad ante cualquier emergencia médica ya que la población de el poblado está aumentando en las necesidades de estos servicios son una necesidad básica.